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Esta librería merece una mirada detallada cuando la visitamos y hacerlo con tiempo.
A metros de la esquina de las avenidas Santa Fe y Pueyrredón, llega con lo mejor de estos establecimientos: el olor a libro viejo con la atracción que tiene para quienes aman la lectura.
Es una de las sucursales de la empresa que, compuesta por profesionales del libro, se acerca a quienes desean vender una biblioteca. Por lo general, y es una pena, son hijos y/​o familiares de alguien que ha fallecido y necesitan unos pesos, lo que logran a través de la venta de tesoros que a menudo no conocen, yendo en contra de la voluntad de quien atesoró volúmenes durante años con la esperanza de que quienes quedan sigan con este amor a lo escrito, pero esto no siempre ocurre.
Las sucursales están en la ciudad de Buenos Aires en Corrientes y Paraná, Av. De Mayo al 600, la aquí reseñada y en San Martín de los Andes, provincia de Neuquén.
El local atrae desde el ingreso. Hay mesas con libros de saldo y a los costados de la entrada dos vidrieras. En la que vemos a la derecha hay volúmenes importantes, agotados y/​o raros, con precios que quien conoce el material pagará con gusto, además de colecciones de revistas completas o casi completas, sin olvidar diarios de una época determinada, por ejemplo los de la muerte del expresidente Juan Domingo Perón o la llegada del hombre a la Luna, no solamente los del día del hecho sino de varias jornadas anteriores y/​o posteriores.
Siguen estantes de biblioteca con libros separados por género o estilo, por ejemplo historia argentina o universal, filosofía y otros temas.
Al fondo a la derecha los estantes varían en temas, ya que el agrupamiento se efectúa por idiomas: inglés, francés, alemán, ruso u otra lengua. Los precios en este caso son adecuados. Quien busca algo sabe que debe explorar los estantes, pues siempre van apareciendo nuevos volúmenes, a menudo con años de publicados.
Merecen una mención especial las dedicatorias de algunos libros… Hoy quizás ya no están ni quien las escribió ni quien la tuvo como destinatario/​a, pero muestran el valor que se daba a la palabra escrita.
También entre las dedicatorias están, en libros de cuento y poesía sobre todo, las escritas por el autor de la obra, quien nunca pensó el destino final de su obra.
Al fondo hay estantes para seguir la búsqueda, como los de revistas viejas y fascículos, a veces desordenados y otras no. Pero siempre conviene, si estamos tras algo en especial que nos falta, tener encima una lista con los números que nos permiten completar alguna colección, como fue recomendado en alguna otra reseña.
No faltan a veces discos, por supuesto de hace tiempo y de vinilo.
La atención es cordial, por profesionales. Se aceptan tarjetas, aunque no sé si siempre o a partir de determinada cantidad; otro motivo para que no haya excusa, ya que puede ocurrir que un volumen buscado no esté al regresar con el efectivo.
La zona, a diferencia de otras en que hay locales de esta empresa, como el microcentro porteño, es tranquila, con los transeúntes sin tanto apuro.
Quizás esta librería de viejo no nos quede muy a mano pero si la visitamos veremos que es un arcón en el que podemos encontrar muchas sorpresas. Alberto Auné

The people running this store, two old men, are very sweet, helpful and friendly! They didn’t have the books in Spanish that I wanted, but they directed me to another bookstore down the street that did have one of the books. So I bought it from there. But I really liked the kindness of the two old men who tried very hard to help me!

Para decidirse a entrar a
y que la visita sea realmente útil, hay que saber que se requerirá de una cantidad considerable de tiempo. Si lo aceptan, entonces van a tener una grata experiencia y, con suerte, algunos libros más.
El local es inmenso, los estantes abarrotan libros usados, por allá otros más apilados, y pasando la sección de «casettes, Vh’s y vinilos», algunos más. Aunque hay varias señalizaciones, el desorden es una de sus características intrínsecas. Pero si saben revolver bien y prestan atención, va a ser sólo un pequeño precio a pagar para encontrarse con grandes gemas literarias a montos ridículamente bajos.
Como me cuesta desprenderme de casi todos los objetos, y en particular de los libros, nunca vendí acá, pero sólo tuve buenas recomendaciones al respecto. Tal vez algún día.

No hay caso, tengo en mi biblioteca mas libros sin leer de los que puedo llegar a leer en mi vida.
Tengo en mi e-​book bajados una cantidad de libros, como para esperar unos cuantos meses en una isla desierta (que tenga un enchufe) que venga el barco salvador.
Pero sin embargo no puedo pasar por Compro-​libros sin entrar y llevarme algo. Es mas, es el culpable de que haya llegado tarde a mas de una cita con mi dentista que esta a la vuelta…
Si uno entra a una «libreria de viejo» como se llamaban a las librerias de usados cuando yoera chico, hay que entrar con tiempo y paciencia, ya que nunca tienen el orden y la prollijidad de las librerias tradicionales, sino que hay que tener ganas de recorrer y de revolver, (y tener cuidado con los acaros que pulular si uno es alergico al polvo)
Libros en castellano y otros idiomas a muy buen precio, discos de vinilo, revistas, enciclopedias (completas o los fasciculos)
Ademas como su nombre lo indica, es un buen lugar para ofrecer libros que sabes no vas a leer nunca (que no es mi caso, que guardo todos)

Como su nombre lo indica, esta librería compra libros por internet y después los pone a la venta en este o en otro de sus 4 locales. Como con toda librería de usados hay que ir con ganas de revolver un poco y mirar estantes, sin miedo a llenarse las manos de tierra. Esta librería especialmente lleva tiempo ya que es un local de proporciones importantes. Sinceramente, recomiendo meterse bien al fondo. Ahí, casi en la trastienda del local es donde encontré las mejores cosas. Hay una sección de libros en inglés donde encontré novelas a 15 pesos, ponele. También hay bastante en francés y algo en alemán e italiano. Por otra parte, tienen una parte donde hay discos de vinilo y casettes. MIRAR BIEN. Yo ahí encontré el primer disco de Crosby, Stills & Nash, original, en buen estado, CON EL PAPELITO CON LAS LETRAS DE LAS CANCIONES ADENTRO (se me cae una lagrimita) por solo 30 pesos.
Paciencia, lo único. Suele haber mucha basura y algunos tesoros, pero la búsqueda suele dar frutos y siempre que entro me llevo algo.