Franck Dauffouis

Pase infinidad de veces por este lugar, nunca me llamo la atención ni me imaginaba las delicias que iba a encontrar adentro…
Un dia mirando no se que programa de televisión aparece Franck y hacen un paneo por el lugar… que sorpresa la mia! es la esquina a la que nunca le di ni bola!
Al dia siguiente fui con una idea fija: «pain au chocolat»… llegué y ademas del pain au chocolat me lleve variedad de panes, con olivas, de queso, baguette… una delicia todo.
Comparto la sugerencia de uno de los Unilocalers: pan, queso, vinito y a comer al parque!
(atención: no es nada económico, es para darse un gusto)

Excelente, el mejor lugar de caballito. El pan con leche y chocolate es sublime.
La atencion muy amable, sin dudas volvere muchas veces más.

No cuenta como panadería, es otra cosa. Hay pan y facturas pero de otra dimensión, son algo único, incomparable. Hay que ir con el hígado entrenado ya que la manteca es omnipresente. Con dos facturas medio que estas hecho. No es barato pero vale la pena.

Rico rico. Llegué a esta sencilla panadería/​patisserie de barrio, muy de barrio (ver foto fachada) por sugerencia de Unilocal y otros. Lo que hacen es sin dudas muy rico, sabroso, y definitivamente confeccionado con mucho amor. Esta es la clase de lugar que te atienden tan bien, que te dan ganas de quedarte un rato más adentro, y sentís que lo que te venden es aún más rico de lo que es. No sabés si es que es tan bueno o si la amable atención lo hace tanto más bueno. El lugar estaba lleno, era una hermosa tarde para estar en el Parque Centenario, el cual está a pasitos, y no por eso escatimaron explicarme brevemente de qué constaba cada cosa. Tienen facturas, panes, baguettes y patisserie muy buena, además de una heladera con refrescos. Te dan esas ganas de volver a probar cada uno de los ítems que dejaste pendiente. Así que… I´ll be back

Visitar a Franck era una cuenta pendiente hace años, que básicamente no cumplía porque casi nunca en mi vida voy a la zona de Parque Centenario. Esta vez estaba relativamente cerca y me hice el viaje. El 2do. viaje me lo pegue cuando probe las especialidades francesas de este gran señor. Debo decir que soy fan y fundamentalista del pan brioche y este es uno de los mejores que probe en la vida. Ahora mi problema es cuando voy a volver a comprar más brioche. En fin, me arruinaron la vida. Una «decepción» (ponele) que tuve fue que según había leído el pibe era «el nazi del pan», que te atendía de mal humor y se impacientaba si no decidías rápido lo que querías. Nada que ver, con su acento frances, fue muy amable y se despidió con un «grrracias por visitarrrnos». Te amo. Chau.

Descubrí esta panadería cuando vivía cerca del Parque Centenario y fue amor a primera vista. Llevé a toda mi familia para decirles «¿Vieron dónde vivo? ¡Vivo cerca de una panadería francesa!». Ese día se me fue medio sueldo invitando a todos, pero lo cierto es que los precios no son caros y todos, pero todos los productos tienen una altísima calidad. En mi búsqueda del pain au chocolat perfecto acá encontré uno de mis favoritos. También tienen unas facturas con almendras que son locura. Merece una mención especial la atención de Franck: como muchos franceses su humor no es un punto fuerte y suele atenderte con la peor, pero si vas preparado puede resultar gracioso. Se enoja mucho con la falta de cambio y con la inseguridad a la hora de elegir lo que querés llevar, el problema es que cuando uno ve las opciones ¡quiere todo!

El que sabe, sabe. Franck la tiene clarisima en la pasteleria y panaderia. Su local es minimo, a unas cuadras del Parque Centenario y pasa completamente desapercibido. Se huele la manteca en el aire y ese sabor se destaca en todo lo dulce. Lo mejor que probe hasta ahora es la croissant de almendras, increible el amor que podes sentir por una factura.
Los precios son caros, saladitos, en algunas cosas excesivo (una MINI porcion de una torta de 3 mousses $ 60, si, tenia tooooda la pinta, pero era MINI); pero para probar distintas cosas esta bien. De todas formas tiene una calidad que no probe en ningun otro lugar, asi que lo terminas pagando.
Vayan y prueben, no decepciona.

Es mi pastelería favorita de Buenos Aires definitivamente. Todo desde la ciabatta con olivas hasta el mil hojas de dulce de leche y crema, las magdalenas, los pancitos con mantequilla y azúcar, la focaccia con cebollas caramelizadas y semillas de amapola!
Aparte Franck Daffois es muuuuy amable y atento!
El sitio no tiene mesas ni sillas, ni es la pastelería mas elegante de Bs As pero calidad si hay!
Ojo no abre Lunes!

TODO SI.
Franck entendió todo. Si encontrás algo en este pequeñito local (ubicado a 1 cuadra de Pque Centenario) que no sea rico, el problema vas a seguir siendo vos.
Si… no es económico, pero todo lo que sale de esta bulangerie tiene AMOR! Y manteca, pero sobre todo AMOR.
Van a encontrar la clásica baguette perfecta y otros panes, pastelería de altísima calidad, vinos y aceites caseros! Mención especial a los croissants, de pastelera especialmente. Mind blowing!
Si querés quedar bien llevando algo dulce en alguna visita, esta es tu parada obligada.

Todo delicioso!!! La brioche, lejos la mejor de Buenos Aires. El hojaldre de manzana es tan sencillo como rico. Los fines de semana tienen mucha mas variedad que entre semana. Todo del dia, los precios no son baratos pero definitivamente lo vale

Es una pequeña panadería francesa situada en una esquina del barrio de Caballito. El local es muy discreto y no llama para nada la atención, pero una vez adentro no sabés qué elegir ante la gran variedad de típicas delicias francesas. Es atendido por su dueño y pastelero Franck, quien es conocido por sus participaciones en canal Gourmet.
Las tartas individuales de frutos rojos, junto con los panes de queso son de lo mejor del local.
No tiene lugar para sentarse pero, es ideal para la hora de la merienda si estás por la zona del Parque Centenario.

Por lejos la mejor boulangerie que conocí.
Por suerte, y al igual que Tierra de Nadie, está escondida en el barrio de Caballito aunque igualmente es bastante popular. Siempre que voy hay bastante gente.
Si bien es un poco más caro que las panaderías en general, vale mucho la pena.
Los productos que se venden son super frescos y originales. Recomiendo los financiers de grosellas y frambuesas, la baguette vienesa y los sucre scons.
La atención es normal, Franck es bastante serio aunque a veces se le escapa una sonrisa y un «merci».

Antes que nada quiero decir que la atención es muy buena, me explicaron con lujo de detalles cada una de las delicias que estaban exhibidas. Finalmente me compré un mix, de todo un poco, se veía todo tan rico… y la verdad que no me defraudó nada, todo estaba delicioso.
Recomiendo el chausson aux pommes y un pan con aceitunas increíble. Y no me quiero olvidar de la croissant rellena de dulce de leche… delicia!!! Los precios son moderados, razonables en relación con la calidad ofrecida. No lo duden, vayan y disfruten cada uno de las delicias de Frank.

No dudo en decir que es la mejor Boulangerie del país.
Franck es un distinto, como sus ayudantes panaderos.
Se me hace muy difícil decir que recomiendo, ya que es de los pocos lugares donde lo que pruebes te vas a quedar con ganas de más… Es todo demasiado sabroso, con los ingredientes justos y con todos los sabores que se destacan.
En mi caso recomendaría si o si la baguette vienesa, desafío a cualquiera a que no se aguanta comerla entera woooow que ricura, los kouign amann un típico pastel bretón que es para matar y todos los postres con manzana y el pastel de almendras que es… Disculpen… Se me cae la baba…
Finalizo comentándoles que los panes son deliciosos y el queso brie que vende es muy barato.
Recomiendo comprar pan, queso, cualquier postre, un vino y caminar una cuadra y tirarse en el parque centenario.

«A este país me trajo una mujer» dice Franck que hace todo en su pequeña Boulangerie ubicada en una esquina.
Los precios no son los mas baratos, pero si querés sentirte en París él te hablará hasta en Francés para que practiques mientras te entrega lo que para mí es el producto estrella: Pain au Chocolat
Es el típico lugar al que llegas por recomendación porque sino quizás ni te das cuenta que es una Boulangerie, es el TESORO escondido
baguettes, croissants aux amandes, madeleines, scons aux fruits rouges, brioche Nanterre, tarte tatin
Et voilà!!! Si sos Fan de Francia sos Fan de Dauffois.

La verdadera experiencia de boulangerie en Buenos Aires. Esta pequeña panadería es atendida por el mismo Franck Dauffouis, quien no duda en hablarte en francés para que practiques un poco el tuyo. Se encuentra bastante escondida en una esquina a una cuadra de Parque Centenario.
Sólo probé el pain au chocolat y, habiendo vivido (y actualmente de vuelta) en París, es la posta.

Había leído acerca de este lugar en una revista y sumado a las reseñas de los Unilocalers, no veíà la hora de conocerlo.
El negocio está en una equina por la que pasé mil veces (vivo en la zona) y nunca me di cuenta que existía. El local es chiquito y un poco descuidado: un par de mostradores, el francés Franck atendiendo y no mucho más. Cuando fui, había fila afuera y era ¡jueves a las 4 de la tarde!
La pastelería es increíble, pensé que con tanta expectativa me iba a decepcionar, pero todo lo contrario, fue mejor de lo que pensaba. En las croissant se siente el sabor de la manteca, el dulce de frutos rojos de los pastelitos es genial. Se nota que la materia prima es de primera y que la mano de Franck sabe lo que hace. El pain au chocolat es riquísimo también.
Además hay panes saborizados, baguettes y otros dulces que no probé pero se veían muy bien.
La atención fue buena y los precios son altos. Cada factura sale más de 10 pesos. Sin embargo con dos o tres de esas estás bien y tu salud no peligra jaja. Ideal para llevar y comerlas en el Parque Centenario mirando el lago.

n el barrio de caballito se encuentra la panadería del francés Franck Dauffouis, reconocido panadero.
Su local se encuentra en Ambrosetti 901. Es un local muy chiquito, apenas tiene lugar para estar ahí adentro, y de afuera no parece que fuera tan gran cosa. Si no conoces de quien es o que hace, realmente no te imaginas que cocina cosas tan ricas.
La pastelería de este hombre es lo mas rico, todo contiene manteca, así que si estas a dieta, no vayas porque es imposible no tentarse. Realmente es un lugar que no tenes que dejar de probar, aunque sea una vez. Es ideal para agasajar a alguien o una merienda con amigas, vas a quedar fantástico.
Tienen un pan con queso adentro que es una delicia. Lo mismo con las baguette. La relación precio/​calidad me parece adecuada.

Cuisson à haute! Absolutamente perfecto!
I made 3 visits in 7 days, tried just about everything behind glass. Exceptional, fantastic! A genuine boulangerie in BA! It’s tiny but well provisioned. There are even some cheeses and other odds and ends in a refrigerator. The only thing missing is a café au lait and a table at which to enjoy life. A savvy local café owner would do well to negotiate a distributorship, or open a place next door. Hint, hint…
Monsieur Dauffouis, s’il vous plaît, faire medialunas de style Argentin.

Ay, ay, ay… las panaderías y pastelerías son mi perdición. No sé que haría sin los fantásticos desayunos y las gloriosas meriendas. Hace un tiempo me habían comentado sobre este maestro pastelero francés que había desembarcado hace unos años en las cercanías de Parque Centenario.
La verdad pasé por enfrente de su panadería cientos de veces y nunca me había dado cuenta del tesoro que escondía. Cuando me llevó una de mis mejores amigas fue un camino de ida.
Aviso: no es barato. Igual no hay nadie que aguante «lastrándose» medialunas, facturas y panes de esta calidad durante mucho tiempo. No ayuda al bolsillo ni a una dieta saludable ja! Pero realmente vale la pena darse un gusto y entrar al universo de las harinas que propone Dauffouis. Como sugerí anteriormente las cosas dulces están de maravillas (imposible no probar las tartas de manzana… y un recomendadísimo es el budín de mandarina) pero tampoco dejes de tentarte con las baguettes mantecosas y los panes de oliva. Vas a terminar rodando pero con una sonrisa que no te va a borrar nadie.
Último dato: no esperes que te reciban con la mayor de las amabilidades. Se estila la transacción tipo «masa seca» pero bueno… todo sea por comer rico!

By far one of the best French bakeries in the city. It’s a tiny spot in Caballito/​Parque Centenario owned by the legendary baker Franck Daffouis.
The croissants are out of this world, as are the pain au chocolat and baguettes. It’s the type of place that’s a bit out of the way, there’s no spot to sit so it’s take away only, and the actual panaderia isn’t particularly pretty, but the exquisite baked goods that come out of there are so great, it’s worth a special try.

Había pasado mil veces y nunca me había dado cuenta que existía hasta que hace un tiempo leí una nota que la recomendaba y fui a investigar. Esta panadería francesa ya es un clásico del barrio pero si pasas distraído seguís de largo, el local es muy chico y no tiene mucha pinta.
Cada vez que voy, la atención me hace acordar The Soup Nazi. Estoy casi seguro que algún día me van a decir NO PAU AU CHOCOLAT FOR YOU y no voy a poder volver.
Si dudas mucho medio que se enojan, la última sonrisa se les cayó en 2010, en el local que es bastante es chico siempre hace mucho calor y aceptan solo pagos en efectivo. Valoren las fotos que me jugué la vida al sacarlas.
Pero mas allá de todo esto, vale la pena. Si sos amante de las harinas no podés no conocerlo.
Tienen diferentes tipos de panes, croissants deliciosas (si tienen las de almendras no se las pierdan), pau au chocolat con el que me casaría, y si te gustan las cosas con manzana te vas a volver loco.
Lo mejor de la panadería y pastelería francesa a precios accesibles.