Küne

El lugar es agradable, pero la atención fue medio mala. El local estaba vacío literalmente, y tardaron en atendernos, más cuarenta minutos esperando una merienda de yogur con granola y frutas. Obviamente también se tomaron su tiempo para cobrar.
Las opciones para merendar son buenas y mucho más abundante de lo que uno podría suponer al leer la carta, que es medio escueta al describir los platos. Si tienen hambre y tiempo, es una buena opción para merendar por Saavedra.

Es un lugar chico, donde se come bien. Comida bien hecha y fresca. Los precios un poco altos, pero nada exorbitante. Las mozas, si tenes suerte, te sonríen un poco. Pero no es lo habitual. No es de los lugares que más me gustan porque no tiene nada especial en el trato, y es una de las cosas que priorizo.

Con un lindo local puesto en una esquina cerca de Av. Cabildo, es una destacada opción del barrio de Saavedra para almorzar y merendar en modo veggie (opción casi veggie disponible también así no hay peleas).
Por qué digo sin peleas? Con una variada carta, podes cortar por lo sano: salteados de arroz yamaní o tartas integrales (la de zanahoria y zuccini es excelente). O podes irte a las pastas caseras como los raviolones de calabaza. De última, si realmente estas con hambre, tenés sandwiches con alguna carne (pollo, atun salmon, jamon) o wraps de pollo o carne.
Le estoy dando mucha vuelta a la idea… lo importante es que tenes muchas alternativas. Y siendo hoy cada vez más común que gente busque opciones veggie, naturales u orgánicas, definitivamente éste es un lugar para que un carnívoro duro pueda acompañar a esa persona que no es tan omnívora como uno.
El servicio es bueno, muy buena atención y muy dispuestos a evacuar dudas de este mundillo (yo llegué a preguntar si tal plato era suculento o si me iba a dejar con hambre… Admito que está bueno que te lleven de la mano un poco). Ya los tengo en la lista de favoritos, me intrigan muchos de sus platos y seguramente estaré de vuelta pronto

Al igual que muchos lugares del barrio, los conozco primero por un delivery que visitando el local. Con Küné me paso eso mismo, durante varios meses almorcé con delivery de este lugar todos los días en la oficina, así que conozco bastante el menú.
En el local me atendieron rápido y muy bien, enseguida nos trajeron unas tostaditas con un dip y nos tomaron el pedido.
Pedí el sándwich Salomón con papas, y resultó ser mucho más rico que las veces que lo había pedido por delivery.
El local tiene una buena cantidad de mesas, algunas pocas afuera, así que es una buena opción para parar a almorzar luego de una bicicleteada o caminata.
Hay desayunos/​meriendas muy saludables y energéticas. También es muy buena la limonada.

Pedí el otro día comida en Kune por delivery. Hice el pedido a través de PedidosYa donde se puede ver en detalle el menú con todos sus precios. Al toque me llamaron de Kune porque no tenían uno de los productos, cosa que me pareció muy proactiva y es cuidar el cliente.
Kune es un lugar para comer cosas ricas y sanas, y en eso me parece que cumple muy bien. Buena oferta de ensaladas, sándwiches, tartas, soufflé, etc
Sus precios son razonables y el delivery eficiente y bien empaquetado.
Volveré a seguir probando cosas.
Muy recomendable

Es un lugar q visitamos semanalmente; nos encanta su menú y su atención es muy esmerada. El entorno es excelente ya que se encuentra en la hermosa avenida San Isidro. Muy recomendable.

Fuí a merendar a esta esquina con un local muy lindo, es chico, con pocas mesas (un poco chicas para mi gusto, creo que de haber ido a almorzar habría sufrido un poco) y tiene además algunas mesas en la calle que vale disfrutar porque el boulevard, especialmente un fin de semana, es lindo y tranquilo.
Los productos que tienen son de una onda natural-​gourmet y se nota que la materia prima que utilizan son de calidad. Yo en lo particular probé el cheesecake, el cual estaba muy rico aunque la porción me pareció mínima. La jarra de limonada por otra parte, era rica y de tamaño super abundante.
Los precios varían entre lo normal y caros, o sea, hay menús con precios adecuados a lo que son y otros precios que me parecieron excesivamente caros, entiendo que lo natural y lo orgánico sea más exclusivo pero creo que a veces hay un poco de abuso.
La atención es muy buena, las chicas son super amables y siempre están pendiente de lo que necesitas. Tener en cuenta que al lado tienen un local donde venden sus productos para llevar e incluso vi que vendían pastas tipo caseras naturales para preparar.

Hace poco nos mudamos por la zona y ayer decidimos probar este lugar para almorzar.
Mi novio se pidió unos ravioles de calabaza con rúcula y hongos. Estaban bastante secos.
Yo me pedí un baguel de salmón ahumado, rucula y palta con papas, estaba muy bueno. Todo acompañado por una generosa jarra de limonada.
Nos pedimos para llevar una porción de cheescake que frutos rojos, ya que todas las tortas y postres eran muy tentadores. Estaba muy rico.
La atención es muy buena las mozas son muy amables y te atienden muy bien.
Lo único, que las mesas son muy pequeñas, apenas entraban los platos, los vasos y la jarra de limonada.
Seguramente volveré a probar sus meriendas que suenan tentadoras.

Pequeño lugar. Muy agradable y tranquilo. Siempre compro ensaladas para llevar. Sólo un vez comí en el lugar. La atención es muy buena y el pâté de garbanzos de cortesía es exquisito. La mejor: ensalada bosque.

Voy bastante seguido a desayunar y/​o merendar a Kune básicamente porque me queda cerca.
En cuanto a desayunos y meriendas, la carta es suuuuper completa. Hay desde lo más tradicional como café y medialunas, pasando por tortas, cookies, yogures, frutas, mini postres diet, budines integrales, muffins y más.
Lo bueno es que ya hay desayunos semi planificados que se ofrecen en el menú y van de los $ 45 a los $ 100 pesos para uno (aunque alguno son tan abundantes que se pueden compartir).
Yo suelo pedir uno integral que incluye: café con leche, jugo de naranja grande, tostadas –grandes– de pan de campo integral con mermelada y queso, y soda, por $ 55– $ 58 pesos. Gran relación precio-​calidad-​estómago. ja
El espacio es acogedor, y cuenta con pocas mesas, lo que hace que se cree un ambiente más intimo y ordenado.
Además hay menús diarios para almorzar que cuestan unos $ 60– $ 70 e incluyen tarta, ensalada, bebida y café. Un golazo si andan x la zona.
Lo último destacable es que Kune ofrece productos naturistas, además de mates, termos decorados, manteles individuales, y demás objetos pequeños, que podés comprar para llevarte a casa.

Es un restaurant de comida natural, ubicado en el barrio de Saavedra. Sobre el bello boulevard de Av. San Isidro Labrador.
Si tienen la oportunidad de visitarlo alguna vez les recomiendo pedirse el plato del día, siempre va variando y generalmente suele ser la mejor opción y la que sale más rápido. Además del plato principal, incluye bebida, postre y café.
Un lindo detalle es que mientras esperas que te traigan la comida, le ofrecen a cada uno de los comensales una tabla individual con unas tostaditas alargadas con gustito a aceite de oliva y para acompañar una salsa de garbanzos, muy memorable.
Los postres del menú te los ofrecen en un simpático vasito de shot, siempre hay distintas opciones para elegir, como chocotorta, lemon pie, tiramisú, entre otras.
El lugar es pequeño, pero acogedor tiene apenas unas pocas mesas en su salón interior y otras afuera. Con ambientación moderna y sencilla. Tienen un sector cerca de la caja, donde ofrecen a la venta varios productos naturistas para que te lleves a casa.