Le Ble

Soy una persona que cree en la segundas oportunidades, pero a su vez las usa como definitivas. Me explico:
Si la primera vez me pareció increíble, voy una segunda para confirmar. Y si la primera me pareció muy malo, tal vez vaya una segunda en busca de reivindicación.
Era la segunda vez que iba a Le Ble, sucursales diferentes, la primera no me pareció gran cosa así que probé en otra sucursal, tal vez era eso.
Siendo Le Ble una cadena de confiterías con por lo menos 8, 9 negocios (como mínimo) distribuídos en CABA, esperaba muchísimo más.
Se caracterizan por su variedad de panes, pero hasta eso me pareció insulso.
Esta vez nos atendió una moza que mientras tomaba el pedido hablaba con un compañero, ya arrancamos mal. Claramente esto hizo que tenga que volver a preguntarme 3 veces cada una de las cosas que pedí.
Cuando parecía que ya lo había entendido, mandó a un compañero a que nos vuelva a preguntar.
Creo que el Teletubbie rojo, también conocido como Po, tenía más capacidades para atender una mesa.
Nos pedimos una jarra (spoiler, la jarra es una botella tipo frasco) de jugo de naranja, frutilla y caradamomo que estaba super aguado y con poco gusto a fruta.
Un croissant con jamon y queso que el pan parecía recalentado y encima estaba frío.
Y un «húmedo de algarroba y nuez con crema» que fue lo único que estaba aceptable.
Cambiaron de mozo y algunas cosas nos las traíà la chica con capacidades de atender mesa diferentes y otras otro flaco, algo que a mí me molesta un poco porque así nunca se a quién debo pedirle la cuenta o cualquier otra cosa, aunque en este caso siempre optaría por el pibe.
No entiendo realmente por qué se llena esta cafetería, qué es lo que hace que la gente la elija, pero no se preocupen, tampoco entiendo cómo es que la gente votó a Macri. Asi estamos.

Todo en Le Ble te lleva a pensar que los panes y cosas dulces que hacen son ricos y frescos.
Bueno, no.
No digo que sea tan terrible, pero la verdad me decepcionó un poco.
Pedimos un juego de naranja y frutilla con cardamomo que mas que jugo parecía agua saborizada, lo que me llevó a pensar o que no le ponían nada de fruta o que directamente usaron esas pulpas de frutas horribles que se compran en el super y que te ponen en los tragos si vas a bailar a un boliche. y además no estaba frío.
Kevin se pidió un croissant con jamón y queso. Parecía como si estuviera recalentado de días…la masa no era rica y el jamón y queso estaban fríos. Creo que una medialuna con jamón y queso de cualquier shell o buffet de club o colegio es mucho mas rica.
Yo me pedí (ahora no recuerdo el nombre) como un muffin de algarroba y nuez con crema. No era feo, tampoco riquísimo.
La atención no fue buena tampoco. Atendieron rápido, pero la chica que nos atendió nos preguntó tres veces el pedido y la cuarta lo mando a un compañero para que pregunte por ella. No se, quizás tenía algún tipo de déficit de atención y la estoy prejuzgando.
En fin, ble.

Lo mejor es el lugar donde está ubicado el local, una esquina muy tranquila llena de árboles, un poco como era lo mejor de Palermo hace 10 años, antes del boom. Tiene lo mejor y lo peor de Le Ble: cosas muy ricas y muy calóricas, carta acotada, precios inflados.
Lo peor: los baños están siempre bastante sucios. No da baños sucios con los precios q manejan. Además, sólo tienen diarios Clarín y La Nación, más revistas de la misma cuña ideológica.
Los mozos son muy atentos.

El brunch es espectacular (sobre todo las tostadas belgas) pero la atencion es pesima. Una hora para conseguir una mesa para 4? No vuelvo.

Esta sucursal de Le Ble como las demás que conozco está justo en una esquina. El contexto de casonas de Caballito le suman un plus a la experiencia.
La carta comprende opciones de sandwiches, ensaladas, repostería y cafetería.
Los platos son abundantes. Esta vez pedí la ensalada Nicoise, muy rica aunque le agregaría más salmón que es el ingrediente importante y casi no lo trae.
Mi preferida sigue siendo la ensalada de pollo frito.
A diferencia de otros Le Ble este no tiene Club La Nación.
Se puede pagar en efectivo o tarjeta.

Además de sentirte como en París por lo precioso del lugar y las calles, la comida es deliciosa.

desayunar en esta esquina e un placer, buena atencion, rica pasteleria, precios accesibles, para merendar sugiero ir antes de las 17.00 hs se llena mucho.

Fui hace unos dios con mi novia. El lugar es lindo, nos sentamos en las mesas de afuera, la esquina es muy linda, con una casa estilo ingles en la esquina, recomiendo ir a fuera.
Nos pedimos ambos un café le ble con un croissant, $ 55. El café es grande, y el croissant tambien, un buen precio. Ambos son ricos tambien, nada de quejas aca.
Pedimos una jarra de licuado de banana, leche, canela y miel. $ 90, aqui si demasiado caro por un licuado de banana. Nada que opinar, simplemente licuado de banana, igual sabor que el que podemos hacer en nuestras casas.
Luego pedimos la cuenta y tardaron bastante, 15 minutos.

Lo mejor en caballito para desayunar o merendar. Las tostadas belgas son deliciosas y las limonadas tmb.

Le ble es una sucursal de la famosa ¿cadena? de cafeterías. Está ubicado en la esquina de la calle Valle y Emilio Mitre, en una de las zonas mas lindas del barrio de Caballito, el Barrio Ingles.
Siempre me gusto el lugar, esta muy bien decorado y distribuido: tiene varias mesas adentro (para dos o cuatro personas y mesas mas largas para grupos grandes) y afuera para disfrutar cuando llega el calor, también tiene un espacio para dejar las bicis mientras desayunas/​almorzas/​merendas. Creo que la palabra que usaria para describirlo es acogedor.
La comida es sensacional: las porciones son medianas tirando a grandes a la hora de brunchear y las promociones para la tarde son, definitivamente, para aprovechar. El café le ble es riquisimo, también el licuado de frutilla y cardamomo pero mi favorito hasta el final de mis días y al que jamas pienso abandonar. EL MUFFIN DE CHOCOLATE BLANCO Y ARÁNDANOS (tiene la medida justa de todo, esta hecho de felicidad –igual no lo compren porque cuando paso y no quedan mas me deprimo-​). Creo que lo mejor que tienen es el servicio para llevar, después de las cuatro de la tarde hay 2×1 en facturas y pan de campo.
Por qué cuatro estrellas? La atención. Las chicas son muy amables y dulces pero tardan mil siglos en traerte la carta, el pedido y la cuenta, a veces se olvidan los pedidos. He visto gente que se levanto y se fue por la demora. Creo que es un punto que deberían mejorar para no perder clientela.
PD: no vayan entre las cuatro-​cinco de la tarde porque agarran la hora pico de salida de los colegios de la zona y encontrar una mesa (y un poco de paz mental) es casi tan imposible como vivir en saturno.

Le Ble es una sucursal parte de una conocida cadena que goza de una fama parcialmente injustificada por parte de los vecinos de Caballito.
Está ubicado en una esquina bastante linda, lindando con el barrio Inglés y su orientación hacia el este lo hace ideal para desayunar o brunchear y cuenta con una clientela fiel, sobre todo los fines de semana.
El problema radica es que la atención es muy lenta. Media hora para traerte el pedido incluso con el local vacio a primera hora. Tardan hasta traerte el vuelto. Otro tema es que la propuesta al menos a mi me pareció demasiado continental: Si bien tienen opciones de Brunch lo que noté que mas sale son Tostaditas, pancitos, medialunas rellenas, muffins, tostados de Jamon y queso y magdalenas las cuales ninguna se destaca en nada comparado por lugares similares en la zona. El café otro tema aparte, para nada intenso.
Otro problemita es el precio: Es un lugar caro producto de su constante demanda.
Un toque favorable es que por allí tenes la bicisenda y tenes un estacionamiento de bicis a disposición.
Mejorando un poco la rapidez de la atención (poniendo mas personal) y mejorando los menus o promos del dia este lugar mejoraría mucho.

El lugar es insoportablemente ruidoso, no les funciona el wi fi y tuve que cancelar una limonada que había pedido porque llegó 20 minutos tarde y ya me había comido el muffin entonces no tenía sentido.
La atención ¿Qué atención? El staff es muy poco profesional (ni hablar de pedirles una recomendación porque no saben nada)
Los precios no son super elevados pero cuando se compara con la calidad y el ambiente no valen la pena. Imposible para leer o estudiar los fines de semana, infestado de niños.

Caí domingo de lluvia 6 de la tarde con el plan de merendar bien y leer tranquila. Tomé un café Le Blé, que para los $ 33 que cuesta me parece buen gesto que sea gigante, pero me resultan muy incómodos esos supertazones. Además para el último tercio ya estaba frío, era demasiado. El croque madame 10 puntos, un pan hermoso, fresco, queso gratinado y el huevo con una yema esperando ser rota para embeber toda la miga… manjar, posta.
Ambiente: bullicio total, una acústica desastrosa. El libro no salió de la cartera. No es tan grande el lugar, pero el ruido es igual al del patio de recreo de un primario.
Volvería un día soleado, cosa de sentarme afuera, ya que está en una calle tranqui y linda.

Este tipo de #brunch es como una bacanal romana –para mi– cuando ligas días grises. Me sorprendieron los huevos con salmón por la suavidad de su textura y sabor. Bah todo deli… No hay queja, incluyendo la buena atención.
Ahora el #café un toque quemado y me llamo la atención que fuera Macchiatto. Pensé que tenían su propio blend.
Como trabajo en cafeterías, siempre me detengo con el tema sillas; especialmente las sillas de madera. Relax… Estas sillas acompañan toda la experiencia.
Al margen de estos detalles mariquitas de alguien que es apasionada del café y el confort de la sillas; vale totalmente la pena venir y regresar varias veces mas.
PD/​@martopoli un lindo domingo y mas escucharte que no podías terminar jajajaj a alguna vez tenía que pasar

Es un lugar clasico para brunch y meriendas. Las tostadas belgas son insuperables al lado del resto.
Lo mejor es que los domingos tienen 2×1 de pan que es casero y riquisimo. Tambien hay 2×1 de otros productos.

A ver, la comida es excelente. Es una pena que se desmejore tanto por la mala atención del lugar. Y no porque sean maleducados, sino porque te tienen esperando 30 minutos para todo.
30 min para la carta, 30 min para la cuenta.
Lo demas de 10, la danesa una bomba, las medialunas una bomba. El café con leche gigante.

Maravilloso para un brunch o café por la tarde al sol.
Libro, buena compañia y le Ble…

Tardaron 20 minutos en traer una carta (tuve que ir a pedirla a la barra), después de pedir dos sandwichs, los trajeron a los 35 minutos ¿Cuanto se puede tardar en hacer dos sandwiches? Cuando trajeron el pedido se equivocaron, y dejaron un sandwich de jamon y queso FRIO y las papas de acompañamiento del sandwich que tuvieron que volver a hacer, alegando que fue un error de LA COMPUTADORA???
A todo esto, sigo escribiendo esta review mientras sigo esperando mi sandwich vegetariano.
La limonada con jengibre y menta muy rica. No se coman todo el pan de la panera enseguida porque van a tener que esperar bastante.
Sigo esperando mi sandwich como una Penélope que come papas rústicas.
Edit: Cuando me trajeron la cuenta, estaba cobrado el sandwich equivocado que nunca habia pedido.
Nos regalaron unas medialunas a modo de disculpas y el sandwich que tardó 40 minutos en llegar no es ningún milagro de la ingeniería y también vino tibio/​frío.

Como sí estuvieras en París pero en Caballito, Gran propuesta la de Leble, recomiendo el desayuno de viaje y lo sándwiches del día, de martes a viernes tienen un menú por 80 pesos para almorzar súper completo. Si van fines de semana estén dispuestos a esperar algo, vale la pena. Súper recomendable.

De todas las invasiones que sufrimos en los últimos tiempos, la de Le Blé es mi favorita. Este es el segundo local que abren en Caballito y para mi es genial porque está a 5 cuadras de casa.
En el límite del Barrio Inglés y por donde pasa el tranvía histórico los fines de semana, esta franquicia francesa, convierte a esta esquina en la mas europea del barrio.
Vamos a encontrar todos los clásicos que tienen en las distintas sucursales.
Para las mañanas de domingos, mi favorito es el desayuno Le Blé que incluye una croissant, un muffin de banana o chocolate, un pau au chocolat y dos tostadas de pan de campo. Ideal para compartir y si sobra llevarlo para la merienda.
Abrieron hace una semana y seguramente necesita mas funcionamiento, pero hay que ir con paciencia. Y al igual que el resto de los locales solo acepta pago en efectivo.