Regimiento de Granaderos a Caballo

Conocí este lugar en el marco de la tercera edición de «Vinos de Argentina» y de este amplio espacio solo el salón de eventos.
El ingresó se realizó por el acceso de General Manuel N. Savio, me indicaron el camino al salón donde se llevaría a cabo el evento, y a mi paso me voy cruzando con las caballerizas, los cuidadores, los caballos paseando sueltos, el olor a «naturaleza», todo a muy poca luz, mientras se veían de fondo los altos edificios iluminados de la zona, una lastima que no estaba con la cámara fotográfica adecuada.
El amplio salón, configurable según el evento que allí se realice, tiene columnas, equipos de aire acondicionado frió calor y baños en buen estado.
Dicho salón se alquila para eventos sociales y empresariales.

Trabajé en este lugar en la Noche de los Museos en 2012, así que tengo inside information (naa, no sé). El lugar es, básicamente, un cuartel. Lo que se ve desde Luis María Campos no es nada comparado con el tamaño real que tiene este lugar. Cuando estuve ahí conversé con varios granaderos (son muy buena onda, sorprendentemente) y me contaron que vivían ahí y alguna cosita más.
Aparte de lo lindo que se ve desde afuera, con esas impresionantes escaleras, el edificio alberga un museo. Tristemente, la página de Internet no dice si se puede visitar o no, o por lo menos no lo encontré (digo, es un museo… no se si es muy rentable tener un espacio dedicado a una exhibición y que esté cerrado al público).
Está bueno ver algunas cosas que atesoran acá, entre las cuales destaco el famoso sable que San Martín le regaló a Rosas y una recreación de la bandera usada en el cruce de los Andes (la original está en Mendoza).

Quizás no parezca el lugar más divertido del mundo desde afuera, pero la verdad es que es una muy buena experiencia. Conocí este lugar en la Noche de los Museos del año pasado, por lo que no sé cómo funciona en días normales. El predio es enorme y estaba muy bien iluminado. Apenas entramos nos mostraron una película sobre la historia de los granaderos que me ayudó a entender un poco más su función (antes y en la actualidad).
Después entramos al edificio que funciona como museo, que es un edificio gigante y muy lindo, digno de conocer. Adentro hay recuerdos de la historia de los granaderos y de San Martín, incluyendo su sable exhibido en una vitrina. En el patio estaba tocando la banda militar, que tocó temas desde la Marcha de San Lorenzo hasta temas actuales y le dio un tono muy divertido al recorrido. Para finalizar la visita, hicieron una demostración de destreza a caballo, para mostrar sus habilidades, todo presentado en estilo show. A pesar de que había mucha gente, estaba muy bien organizado y se podía recorrer con tranquilidad.

La pelicula que el gobierno militar de entonces hizo para hornar al General San Martin, llamada El Santo de la Espada, se estreno en 1970. Yo estaba promediando la primaria, y nos llevaban a todos los chicos a verla, para admirar al gran San Martin.
Durante la proyeccion, un gran aplauso estallaba durante la batalla de San Lorenzo cuando llegaban los granaderos a caballo a pelear (cual caballeria en las peliculas de indios)
Este Regimiento lo creo justamente San Martin, para la lucha por las guerras independientistas, en 1812.
Hoy no tienen mucha actuacion, salvo los dos granaderos/​estatua que custodian la casa de gobierno sin poder mover un musculo ante la gente que pasa, y el desfile por avenida del Libertador interrumpiendo el transito vehicular cuando van hacia Plaza de Mayo para el cambio de guardia
Fueron muy importantes para nuestra historia, mas alla de su presente, hay que honrarlos.