Todo Tartas

Sisisi. Si a todo lo que hay ahi adentro.
Las tartas son grandes y ricas y hay mucha mucha variedad. El menu se divide entre tartas calientes y quiches frios. Entre estos ultimos, somos asiduos del de panceta y ciruela, gusto no muy comun en ub local de comida para llevar.
Las de verdura son muy buenas pero especial mencion merecen las tartas dulces.
La masa es un 5 pero los rellenos son muy buenos, especialmente una de chocolate blanco y dulce de leche. Empachate tranquilo.

Todo Tartas es el paraíso para el que sale tarde de laburar y no tiene ganas de cocinar pero tampoco que lo acueste un delivery. Muchas variedades en un gran precio.
Creo que la de Pollo a la Mostaza es una de las mejores para probar. Tienen postres que también juegan muy bien. Solo efectivo.
El punto negativo y es por el que tienen 4 estrellas es que te atienden con mucha mala onda. Al punto que aveces no me dan ganas de entrar al local.

Todo tartas es el cielo en la tierra. Cuando dicen «todo», realmente se cumple. Con variedad de masas e incontables sabores, este lugar es una gran salvación en momentos de apuro. La porción vale cada centavo y llena el estómago completamente. Anímense a probar y a disfrutar con este paraíso de tartas! Recomiendo rotundamente!

Me encanta!
Me encanta el concepto de que sean tartas. Soy muy fan de las tartas así que está es una buena opción de delivery para mi cuando no estoy en busca de chatarra.
Tienen MUCHA variedad.
Mis preferidas son la de pollo con salsa blanca y la de coliflor. Hay clásicas, hay clásicas con algún twist, hay algunas soufflé de distintos vegetales (como la de coliflor o brocoli). También hay combinadas, con masa integral, con semillas y hasta algunas muy power con panceta y etcs.
No es muy barato, pero con una porción comes ya que son bastante abundantes así que finalmente es una buena opción.

Gracias a un amigo que vive cerca y es un experto de los deliveries fue que llegué a conocer este local. Un local pequeño pero bien puesto, pensando exclusivamente para el delivery o para llevar. Pueden pedirse porciones (¼ de tarta) o la tarta entera. Frecuenté varias veces, así que pude probar una gran variedad de los diferentes gustos de tartas que ofrecen y no tengo ninguna crítica, sino elogios. Aprovecho para recomendar la de pollo con crema de mostaza (mi preferida!) y la de acelga, calabaza y choclo de masa integral (para los más sanos). Los precios (solo en efectivo) son económicos y razonables a lo que se están viendo hoy en día en otros locales. Como todo delivery, en horas picos puede llegar a tardar, así que a veces la mejor opción es ir a retirarlo al local.

Trabajaba cerca de la zona y como la oferta de lugares para almorzar era de precios elevados, no había un día de la semana en que no almorcemos las tartas de este lugar. Si vas al mediodía durante la semana hay una pequeña fila de gente esperando para pedir, y un montón de chicos se reparten las tareas: atienden, cobran y uno puede ver a los cocineros atrás a mil por hora. De todas formas aunque siempre hay gente la atención es rápida.
El local está ambientado muy minimalista y moderno, todo blanco y limpio, y hay un exhibidor con las diferentes tartas y quiches. Mis preferidas son las de calabaza y miel con cebollas caramelizadas, la de humita, y la más bomba de todas: panceta con ciruelas, crema y muzzarella. Se pueden pedir una porción, o alguna noche que no tengan ganas de cocinar se pueden pedir una tarta entera.
También hay tartas dulces: de chocolate con dulce de leche, de ricota, frutilla con chantilly, entre un montón más. Si tienen la posibilidad de calentarlas en otro lado, pidan la tarta fría porque si la calientan ahí tardan un montón más.

Es imposible entrar a Todo Tartas y no dejarse tentar por las cosas que ves. Ya desde la vereda podés ver a través del frente vidriado la comida puesta en un mostrador. Y esto no es casual. Está pensado especialmente para hacerte desear todas las cosas ricas que acá tienen.
El local en sí no es muy grande y está pensado para que pidas y te lleves la comida para disfrutarla en tu casa o en otro lado. Una de las cosas que me gusta mucho es que podés ver el trabajo en la cocina, algo que siempre me da seguridad.
Te podés llevar las tartas por cuartos, mitades o enteras. Todas son muy ricas, pero mi preferida es el quiche de calabaza y miel. Increíble. Y si estás con ganas de algo dulce, también hay tartas de chocolate, frutales, de ricota y postres que incluyen varios cheese cakes, brownie, tiramisú, o un clásico flan casero.
Eso si, el delivery puede tardar muchísimo, cerca de una hora, porque la cantidad de pedidos que tienen es inmensa y los chicos no dan abasto. Mejor andá a buscar lo tuyo y disfrutalo rapidito.

No entiendo como la ciudad no está plagada de más franquicias de «Solo Tartas». Los argentinos somos fánticos de las tartas, y si bien las preferimos caseras, las de este lugar no decepcionan y te salvan en esos momentos en que no tenés nada hecho para comer.
Ricas, frescas y bastante económicas, hay tanto saladas como dulces (tortas), y de todos los gustos. Mi paladar recomienda la de calabaza y miel con cebollas acarameladas.
El local, que no acepta tarjetas, solo tiene venta a la calle o hace delivery para los de la zona.