Sin duda, la mejor pizza de Colón y todo un clásico supongo porque el local, que es una casona antigua, debe existir desde hace fácil 70 años. Pizza en horno a leña, al molde, ni muy gruesa ni muy fina, rica masa que llega crocante como debe ser, con generosidad de ingredientes y rica muzzarella. Podría tener 5* pero le tira para abajo que la atención es algo lenta. Fui ya dos veces, en los dos viajes a Colón que hice, y volvería a ir la próxima sin dudas. Suele haber espera en horas pico porque es un hit, pero vale la pena.