Por su ubicación frente a la plaza principal de Concordia, no sorprende que sea muy frecuentado. A diferencia de su sucursal hermana«Cristobal», que es una parrilla situada a pocos metros, atraen a un público más joven y casual. Fui testigo de cómo sus puertas no dejaban de abrirse, y de la poca gente en la parrilla. A ver, empecemos por lo bueno. –La atención era muy amable, y si bien el mozo se quedó hablándonos por un rato no resultó molesto. Tardó un poco en tomarnos el pedido y darnos la cuenta, pero es comprensible cuando hay muchas mesas distribuidas entre el salón, la calle y la plaza(sí, también podés sentarte en la plaza). –El volumen de la música era alto, pero se las arreglaron para encontrar el equilibrio justo para poder escuchar a todos en la mesa; podés entablar una conversación sin gritos de por medio. –Los precios… normales. Ahora, lo malo. O lo no tan bueno. –La tenue iluminación, si bien en algunas circunstancias es bienvenida, dejaba en la oscuridad total a algunas mesas más al fondo. –La acomodación de las mesas deja mucho que desear. Estábamos demasiado cerca de varios grupos, y resultaba incómodo para salir. –La comida no era tan buena. Particularmente el queso, no me gustó mucho. Una lástima, porque justo pedimos papas fritas con queso y panceta y pizza. Habrá que ir a probar otros platos. Está bueno que tienen muchas propuestas para ir a comer barato. Cada día de la semana determinados platos están rebajados(ej: un día los que vengancon pollo, otro las pastas).
Ceci J.
Rating des Ortes: 3 Buenos Aires, Argentina
Cristobal es sin duda uno de los bares típicos de Concordia y que, aún con el paso de los años se mantiene abierto, siempre la misma impronta con cambios mínimos pero fundamentales que ayudan a mantenerlo siempre vigente. Esta tradicional esquina concordiense funciona como bar, café y restaurante. Su carta está compuesta por distintas minutas y está abierto prácticamente siempre. Ofrece una amplia variedad de comidas y bebidas. Desde platos elaborados a cosas simples, igualmente con las bebidas, se puede optar desde cosas clásicas o tragos. Ubicado en una esquina frente a la plaza principal de la ciudad a través de sus grandes ventanas o en la vereda en verano primavera. Al ser una ciudad chica todo el movimiento de gente es en esta zona lo cual le permite a uno ser, con bebida en mano, un espectador de la ciudad en su máximo esplendor: la gente yendo y viniendo del trabajo, la que pasea, la gente preparandose para salir los fines de semana. Es frecuentado por gente de todas las edades, en la distintas franjas horarias. Es común ver grupo de adultos desayunando a la mañana, familias comiendo, grupos de jóvenes tomando algo a la nochecita. La atención es excelente, los mozos son super amables, el servicio es bueno. La comida no se destaca ni sobresale, tampoco defrauda. ELDATAZO: Es fantástico para ir a desayunar después del boliche.