Estadio Francisco Cabasés

Es difícil ser objetivo cuando esos colores que llevas te mueven por dentro, así que brevemente será menos subjetivo.
Llevado a más en los últimos tiempos, la Boutique es el típico estadio coqueto de barrio, con un imponente estandarte desde afuera, y por dentro sumamente acogedor.
Las canchas de césped sintético que se encuentran en el predio son muy buenas para optar un partido con amigos con ese monstruo bello de ladero.
Ya dentro, la mejor ubicación, por lejos, es una platea remodelada y que muestra que de a poco, se intenta que sea un estadio modelo, sin cerco perimetral y con acrílicos divisorios que hacen excelente la vista.
Y el ambiente, en días de partido, olvidate que te cuento, tenés que ir.

Probablemente mi reseña tenga poco de objetivo en este caso. Y es que siendo hincha de Talleres, y habiendo ido cientos de veces a este estadio, para mí es el más lindo.
Por empezar, ha sido remodelada en los últimos años, se la pintó íntegramente de nuevo y se le instalaron torres de iluminación por lo que es realmente todo un lujo visitarla.
Ya desde afuera se puede notar que no es un estadio más de fútbol. Cuidadosamente pintado con los colores azul y blanco que distinguen al club que alberga. Ya en su interior el estadio si bien pequeño es una joya del futbol local.
Tres de los laterales de la cancha están cubiertos con tribuna baja, denominado normalmente como popular, y en uno de sus lados se encuentra la llamada platea preferencial. Este sector de la tribuna es mucho más alto y se encuentra techado.
También en este sector se encuentran las cabinas de transmisión, y en la parte inferior unos palcos con pequeñas butacas para algunos invitados o personalidades del club.
El estadio debe su nombre al gran Paco Cabasés, quien al día de hoy con más de noventa años se sigue encargando del cuidado del mismo, y hasta de cortar el pasto del campo de juego.

Antes de arrancar quiero aclarar que no soy de Talleres, ni siquiera soy de Córdoba. Desde que llegué a La Docta, como amante de fútbol me dije bueno vamos a ver a los tres grandes de Córdoba y a seguir a uno por lo menos por un torneo. Así fue que conocí los tres clubes y sus tres canchas. Lo primero que tengo para decir de La Boutique, como se conoce normalmente al estadio de Barrio Jardín, es que es la cancha de fútbol más linda que vi en mi vida, es así es linda. Tiene una fachada hermosa, es chica la cancha pero es demasiado linda, yo la verdad me enamoré. Todas las canchas son iguales, cemento, columnas, escalones, bueno esta no, yo no quiero ofender a los de Belgrano o Instituto, pero sus canchas serán más grandes pero son feas. La Boutique tiene algo que ni se cómo explicarlo, hay que ir, hay que estar ahí.
Bueno obviamente, ir a ver un partido es único, la gente de Talleres es muy pasional, no abandona nunca a su club, llena el Kempes, revienta La Boutique, hace la bandera más grande del mundo. Hacen cosas de locos. Viniendo de otra provincia, habiendo ido a todas las canchas de Córdoba y conociendo un poco todos los clubes, no tengo dudas que Talleres es el más grande de Córdoba, no me odien los de los otros equipos.

Conocido como «La Boutique de Barrio Jardín» este estadio fundado en 1931 y con capacidad para 18.500 personas, es la sede oficial del Club Atlético Talleres. Está ubicada en pleno corazón de Barrio Jardín en predios donados al club y, desde su remodelación en 2008, cuenta nuevamente con habilitación de AFA para albergar partidos oficiales de cualquiera de sus categorías.
En todo caso, muy raramente Talleres juega suspartidos de local ahí, por una cuestión principalmente de capacidad, haciéndolo, en cambio, en el Estadio Mario Alberto Kempes (ex Château Carreras)
Desde hace un par de años, en el jardín frontal del estadio se construyeron canchas de cesped sintético, de 5, 7 y 9 jugadores, que se alquilan al público en general, muy bien iluminadas y con solo un problema:
La barra brava del club tiene, aparentemente, autonomía e impunidad absoluta sobre las canchas, porque es súper común que molesten, roben, le coman el asado a la gente que está jugando, entre otras fechorías, que no sufren ningún tipo de represalia por parte de los empleados del club, porque les tienen miedo, así que si no sos del tipo que disfruta ser molestado por salvajes, quizás tengas que jugar en otro lado.
En todos casos, actualmente la cancha está muy linda, después de haber pasado muchos años abandonada, ahora por lo menos está bien pintada y aparentemente en condiciones!