Farmacity

Durante casi dos años este local de Farmacity fue el que me salvó las papas cuando salía tarde de clases y había olvidado comprar algo que necesitaba (algo que ocurre el 97% de las veces).
Está casi escondido en plena 27 de abril porque, si bien tiene un letrero de LED poco difícil de esquivar de noche, el frente es de apenas unos 5 metros de ancho y de día puede pasar desapercibido. Pero para adentro es enorme. Tiene todas las cosas que vas a encontrar en cualquier local de la franquicia, acá no me voy a detener, pero en mi caso funciona por algo muy simple: casi nunca hay gente. Entonces entrás, elegís sólo lo que tenés que llevar (claro, como si fuera tan simple) y te vas. Así que cuando andás medio apurado en el centro o no querés perder la combinación del colectivo, esta es tu mejor opción. Además, los guardias no suelen ser tan ortibas como en el resto de los locales y no te hacen mala cara si pasás con la mochila o tu bolso a hacer las compras. Puntazo a favor.
Variedad, orden, buen trato y corta estadía. Por eso las cinco estrellas.
Hasta el próximo olvido.

Otro Farmacity mas, se diferencia del resto porque es mas espacioso y separado.
Tenes la farmacia al fondo, las góndolas con productos variados, y en la entrada la parte de perfumería, todo no variado sino VARIADISIMO. Cada tanto hay 2×1, o 3×2, o descuentos en el segundo producto que esta bueno si te abasteces de muchas cosas y congelas el precio o si son cosas que gastas rapido sino es básicamente lo mismo.
No suele haber mucha gente por lo que las cajas siempre funcionan rápido.

Esta sucursal es de las mejores de Farmacity.
Si bien son todas parecidas, esta tiene una mejor distribución del espacio por lo cual es más cómodo recorrerla.
Tienen muchos 2×1 y 3×2, a veces en 2 ocasiones por semana.
Por supuesto reciben todas las tarjetas, hasta American Express.
Gran variedad de maquillaje y esmaltes de uñas.