Fuimos a este restaurante por una cena de despedida. La idea la tuve yo ya que ya había venido un par de veces y la experiencia no había sido mala. Hicimos reserva para las 21.10(para 8 personas), llegamos puntuales y enseguida nos llevaron a nuestra mesa. Para mi sorpresa, armaron una mesa cuadrada gigante, cosa que me pareció un buen detalle, no solo porque se ahorra espacio, sino también porque así todos nos podíamos ver la cara. El lugar es grande, muy lindo, con decoración rústica. Lo que pasa con esta parte de Lomas de Zamora es que se empecinan mucho en imitar los restós de Palermo, desde la ambientación, hasta la comida, llegando a los precios. Nos sentamos a la mesa y nos atendió nuestro mozo. El señor era un poco(bastante) despistado y cometió varios errores en la noche. Primero, tenía manos de manteca: se le cayó una de nuestras provoletas al piso y tuvimos que esperar un poco más para que la traigan. Segundo: se equivocó con las bebidas y nos terminó mareando a nosotros. Tercero: pedimos(dos veces) unas papas fritas que nunca llegaron y que aparecieron en la cuenta(y obviamente fuimos a pedir que las saquen). Cuarto: su manera de tratarnos dejaba mucho que desear. Quinto: estuvo casi toda la noche al lado de nuestra mesa, lo cual se volvió un tanto incómodo porque esperaba a que demos el último bocado del plato para retirarlo. Pasando a la comida, definitivamente es la estrella del lugar. Pedimos dos provoletas y una porción de rabas que eran súper abundantes y verdaderamente deliciosas. Después pedimos asado, pollo y una tabla de achuras(junto con algunas ensaladas). Las carnes también estaban riquísimas y, aunque éramos 8 gordos, sobró comida. Los postres estuvieron excelentes, yo me pedí un crumble de manzana con crema, pero los demás se pidieron volcán de chocolate, panqueque al rhum y frutillas con crema. Todo parecía estar muy bien. Nos terminamos los postres, pedimos la cuenta y nos fuimos. La relación precio/calidad es la que se espera de este tipo de restaurantes. Como dije antes, es un estilo palermitano, así que los precios se manejan en ese rango. Hay descuento con Club La Nación y la contraseña del wifi es 12345678.
Leandro K.
Rating des Ortes: 4 Buenos Aires, Argentina
La atención es genial. La carta de vinos buena, y la parrillada para compartir, también. Todo a punto. Es una parrilla al estilo de Puerto Madero. Con vino, y una provoleta de entrada, calcularle 250 pesos por persona. Por otro lado, las pastas también son abundantes y es muy probable que no termines el plato. Esta bueno para ir con grupos(especialmente si vas a ir a comer con tu familia por alguna celebración tipo cumpleaños)
Ara R.
Rating des Ortes: 3 Buenos Aires, Argentina
Parrilla ubicada en el corazón de las Lomitas. Tiene una onda a las parrillas de Puerto Madero, su nivel es elevado, esto lo aclaro porque no es la típica parrilla de barrio. La carne es de primera calidad y las guarniciones son sofisticadas. El precio de los platos es elevado. El lugar es bien grande con muchas mesas. Y no cuenta con estacionamiento.
Javier P.
Rating des Ortes: 3 Llavallol, Argentina
Muy buena atención. Excelente comida. Está muy bien ubicado en el centro de Lomas de Zamora conocido Cómo Las Lomitas. el precio? Moderado pero lo vale por que los platos son abundantes. Es un muy buen lugar para elegir si sos de la zona. Muy recomendable
Cristian D.
Rating des Ortes: 5 Buenos Aires, Argentina
Excelente comida, muy buena atención. Un lugar para comer y relajarse. El ambiente es cálido y las mesas están separadas.