Vía Bariloche

La terminal/​central de Vía Bariloche es la más AH NE que ví en mi vida.
El predio que ocupa es de dos manzanas, así que todo es gigante. Las oficinas, los galpones donde hacen el arreglo y el mantenimiento de los micros, todo todo todo es tamaño Gulliver.
Un poco de historia: mi mamá trabajó en turismo cuando era piba, y conoció al dueño. Antes, Vía Bariloche se llamaba El Canario, en referencia a la pelirrojez (?) del tipo en cuestión. Empezó haciendo viajes escolares, hasta que logró juntar la guita necesaria para su primer micro, después para el segundo, y así sucesivamente. Hoy en día, Vía Bariloche es dueña de otras empresas de transporte (Don Otto, Vía TAC, El Rosarino, entre otras), y es una de las grandes empresas de transporte de pasajeros del país.
Dato curioso para los fans de Harry Potter (o/​): entre las empresas que «maneja», hay una que se llama Albus *vomita un arco iris*
Volviendo un poco a la reseña, el edificio de oficinas está a medio terminar, pero sólo te das cuenta si lo ves del lado de adentro, así que sigue siendo increíble. Todo es nuevo, todo último modelo. Flasheas Puerto Madero pero en realidad es Pablo Nogués, así que no salgan a buscar ningún restó.