Blancanieves

Y finalmente fui a probar los panchos de Blancanieves. Y paso lo que esperaba: Tanta ansiedad le jugó en contra. La verdad no me pareció nada especial. El local esta cerca de la estación y tiene algo querible en si mismo. Eso de comer ahí sentado le da otro gusto. El pancho es rico, pero nada del otro mundo. Probé la salsa Blancanieves que no me gustó. No llegue a probar los helados. Entiendo el valor sentimental para los que se criaron en la zona, pero me parece que es eso y nada más.

A mi el pancho de este lugar me parece malísimo y sobre valuado. La salchicha es la chiquita tipo de supermercado y el pan no esta mal. Es una heladería berreta de barrio que ademas hace panchos, no es una pancheria. Para sentarse tenes un banco en la vereda. Los panchos son carisimos, si sos mujer te comes 2 si sos hombre 3. Con algo para tomar gastas lo mas que en Deli Club que es a la vuelta. Totalmente sobre valuado y mitificado.

Me faltaba este clásico de clásicos. Se trata de un lugar que tiene 55 años de historia vendiendo panchos y helados.
El pan es perfecto, aireado, a la temperatura ideal y con el tamaño justo. La salchicha es riquísima, un poco ahumada y claramente superior a cualquier otra que haya probado. Las salsas están muy buenas: me sorprendió que usen mostaza con miel marca Soz y me gustó mucho la de crema de cebollas. Los sabores son sutiles, buen equilibrados.
Los helados están buenísimos también, con gustos clásicos y no tanto (bananita Dolca, por ejemplo).
Ofrecen línea Coca Cola (graaaaan punto a favor) y la atención es de primera.
Podrían mejorar poniendo algunas mesitas o una barra, ya que es medio incomodo comer un pancho con una coca en un banco de plaza.
Fuera de eso, me resultó excelente. Para comer panchitos, sin dudas es una primera elección.

Helados y Panchos.
Y aunque los helados sean muy buenos acá la estrella es el Pancho. Salchicha tipo alemana y pan de panadería especialmente preparado para el local.
Es imposible comer sólo uno.
No dudo en recomendarlo.

Tengo que arrancar la reseña contando que de todas las visitas que hice al local, la última fue una víspera de feriado 5 minutos antes de que cierren a las 12 de la noche. Ya habían guardado la plata de la caja y estaban listos para salir corriendo.
Mi novia y yo les camos muy tranquilo y pedimos dos panchos y una gaseosa. Sin decirme ni una palabra, me cobraron, nos los dieron y nos agradecieron por la compra. Salimos a sentarnos afuera y recién ahí nos dimos cuenta que el local estaba cerrando. La buenaonda que tuvieron es épica.
Para ellos mi gratitud eterna. Los panchos son una gloria, las salchichas son muy sabrosas y de tamaño generoso sin llegar a ser tipo alemanas. De todas las salsas que tienen mis preferidas son la Blancanieves y la de queso. Y los helados artesanales también están excelentes, con la cremosidad justa.
Un clásico que nunca decepciona.

Imposinle resistirse a un pancho al paso si andas por Martinez, yo mi hija y ojalá que sus hijos puedan disfrutar de sentarse en la vereda a disfrutar de la experiencia

Los panchos de Blancanieves son LOS PANCHOS. «The panchos». Un clásico de Martínez que está hace añares a dos cuadras de la estación para el lado de Libertador.
Posta. Nada los supera. y olvídense de comer uno solo. Van dos mínimo. Te llevás tu pancho, te sentás afuera a comerlo y ya estás pensando en el próximo. Puede resultar un toque caro pero son tan ricos que no importa nada!
Como debe ser con todo buen pancho, las salchichas se salen del pan.
Y se le pueden poner salsitas varias que son riquísimas… la mostaza con miel es mi favorita y la de queso roquefort (me rehúso a llamarlo queso azul) la rompe.
Además de panchería también es heladería pero debo reconocer que no compré nunca helado acá. Todavía lo tengo pendiente.
El local es tirando a chiquito (tiene formato de heladería chica de barrio) pero ya quedó claro que no vamos por el diseño y además te atienden bien.
Vayan. Ya.

Si sos de Martinez conoces Blancanieves, fuiste a blancanieves y volves a blancanieves. Asi como lo haces con Coquito en San Isidro. Son clasicos que siempre estan.
Su tamaño no es el del típico super pancho pero tampoco es comerse una Vienissima.
Lo mas rico son las salsas que salen del clásico ketchup, mostaza y mayonesa.
Tienen una honey mustard muuuuy rica (eso que no me gusta lo agridulce)
Otra que me encanta es la de queso ahumado y la de hongos.
Ahora mismo recuerdo también la de hierbas, de cebolla, campestre, de aceitunas, parmesano, queso azul y una mostaza con pimientos pepino morron y ciboulette.
Con respecto a sus helados son 100% artesanales. O sea que es de elaboración propia y realmente se siente ese gustito diferente al resto.
Por ejemplo se jactan de tener el dulce de leche mas rico simplemente porque lo siguen haciendo como lo hacia la abuela o el sambayon, es otro must en este localcito de la calle Paunero.
Sus precios no son super accesibles pero lo valen. Siempre lo valen.
Su local es chiquito, eso si. Si vas con auto y tenes la suerte de vivir cerca es recomendable comprar y llevar. Sino podes comer ahi mismo es las banquetas o en las sillas de la puerta.

Todo aquel que viva en zona norte o suela frecuentarla, tiene que de seguro conocer este lugar que se ha convertido en objeto de culto (y para el que no viva o frecuente, ésta quizás sea la mejor excusa para hacerlo).
Si dijese que se trata de una panchería, quizás varios se desilusionen o subestimen este local. Sin embargo, son varias las celebridades que se han convertido en habitués de éste.
Solamente hace falta ir, pedirse un pancho de salchicha alemana entre pan es de excelente calidad, acompañado por alguna de sus famosas salsas: tártara, queso, provenzal, etc. Se pueden comprar para llevar o sentarse en el banco que está sobre esta linda calle de Martinez a degustarlos. Y si se quiere hacerla completa, se puede terminar con un helado casero.
Si se piensa en panchos, no es lo más barato que pueda encontrarse. Sin embargo, tengan la confianza de que serán de lo mejor que han probado.

Por el amor de Jebús, los mejores panchos sobre la faz de la tierra. Magníficos, maravillosos, majestuosos, riquíííísimos. Vamos a hablar de salchichas, así que no nos pongamos degenerados. Acá vamos.
Tamaño ideal, ni muy grande ni muy pequeño, con una piel que se mantiene lo suficientemente tirante como para mantener la dureza ideal que debería tener un pancho. Al margen de la salchicha, los condimentos que ofrecen, aunque nada excéntrico, son el mejor acompañamiento que podrían haber inventado, en particular la honey mustard. Se me hace agua la boca.
A menos de dos cuadras de la estación Martínez del Mitre, Blancanieves está en el barrio de Martínez desde 1961, historia que la transforma en una tradición inexpugnable de Zona Norte. Con un banco de plaza en la puerta, lo más divertido de Blancanieves no es comerlo ahí sino llevarlo mientras llegamos a la estación. Eso sí, cada pancho cuesta una pequeña fortuna, pero ¡no sean angurrias! Es una experiencia religiosa.

Un verdadero clásico de zona norte, Blancanieves está presente ya hace muchos años y si sigue en vigencia es gracias a la calidad de sus productos. Acá vas a poder encontrar panchos hechos con salchicha alemana (esa que tiene la piel gruesita y gusto a ahumado) y disfrutar de ricos helados.
Si querés probar las salchichas, andá sabiendo que vas a terminar pidiendo dos. Están buenísimas y hay muchísimas salsas para acompañarlas e ir descubriendo. Para mi la mejor es la Honey Mustard. Le da un plus mientras que seguís saboreando el pancho, es decir, no le cambia el sabor base. Y si querés un helado son todos muy ricos, imposible de elegir uno solo.
La única contra del local es que es muy pequeño y solo tiene un banco largo pegado a la pared de enfrente del mostrador, con lo cual si hay mucha gente no tenés donde comer. O si, si elegís ir a los bancos de afuera.
Es increíble el fanatismo que despierta este lugar. Una de las pocas pancherías que vi que en las paredes tienen notas de diarios que les hicieron. Un lugar muy digno de descubrirse.

La versión argenta de «Blancanieves» es mucho más interesante que la yankee, claramente. Porque para nosotros el clásico de Disney representa a una de las mejores pancherías del país.
Su local en Martinez tiene 45 años de historia y ofrece los típicos panchos alemanes (la salchicha ahumada con piel) servido en un pan casero espectacular. Para agregarle sabor, tienen una gran variedad de salsas elaborados por ellos mismos, que van desde desde finas hierbas hasta mostaza con ají.
¿Sabías que??? Estos sabores también los podés llevar a tu casa o tu fiesta contratando su catering de panchos y salsitas. Además, ofrecen canilla libre de cerveza y sus helados artesanales.