Verolio

No les voy a mentir, si no fuera por el restoran el hotel era olvidable. Llama la atención por su estética conceptual. Toda la decoración está en función a la temática del local: Oliva (aceitunas y aceites).
Tuve la oportunidad de probarlo un miércoles a la noche cuando pareciera que su única clientela eran los huéspedes del hotel. Lo cual me dio la posibilidad de conocer más detalles del lugar charlando con la persona encargada del servicio.
Arranqué con una degustación de aceites de oliva. Me pregunta la moza si sabía de aceites, tímidamente le dije que «algo». Me contó de parietales y procesos. Me abrió las puertas a todo un mundo para descubrir. Los aliños perfectos para cada tipo de comida. Y obviamente me terminé comprando un aceite!
Estamos acostumbrados al aceite fuerte pero los más suaves dan para usarlos con cosas dulces o para crear versiones livianas de recetas ya conocidas (mayoliva).