Hay varias pizzerías en la zona(Algunas muy buenas o con más tradición), pero mi favorita por escándalo es La Casona. Por sus ingredientes, por la variadísima carta que tiene, por el glorioso piso que le forjan en el horno de barro es que soy uno de esos fieles que pueden cruzarse de Ezeiza a Monte Grande para buscar una pizza más allá de las fronteras del delivery. Vamos a desarrollar: El piso de estas pizzas es sublime. Fino, crujiente y consistente, con una masa verdaderamente sabrosa que hasta se banca el recalentado del día siguiente. Pero qué placer comerlas ni bien salen del horno de barro. Otro punto altísimo es la gran variedad de pizzas que tiene entre especiales, rellenas y clásicas. He probado variedades de berenjenas condimentadas, provolone, cuatro quesos, vienesas, de mar, champignones y siempre fueron de primera calidad los ingredientes. Juegan en otra liga. Además, las pizzas son muy grandes y a un buen precio($ 130 la de mar, Mayo 2015) Para acompañar hay algunas cervezas de Antares, Otro Mundo e incluso algunas importadas como la catalana Estrella Damm.