Maxikiosco Al Límite

Ah, Al límite o mejor conocido como «el kiosco del pelado». Es la parada obligatoria al menos tres veces por semana, ya sea para cargar la SUBE (cuando tienen sistema, cosa que no siempre pasa) como para comprar galletitas o algún chocolate para mimarme.
Es uno de los pocos kioscos de la zona que venden Kinder Bueno, así que siempre sé dónde buscarlo.
La atención puede ser medio fría, especialmente si te atiende el pelado. La mujer que atiende a veces es mucho más amable. Eso no quiere decir que el pelado no los ea pero sí es medio distante, cosa que no ayuda cuando sos un vecino que va todas las semanas.

La verdad es que kioscos no faltan en Ramos, por lo menos en esta zona, pero Al límite siempre es una buena opción, tanto por el surtido que ofrecen como por los horarios que manejan; cierran bastante tarde y sirve para una escapada de última hora para conseguir algo rico. Por el lado de la atención, depende de quién te atienda, a veces es todo sonrisas y otras es un trato más serio, pero siempre con buena educación.