Esta es la calle más pintoresca de Roldán, digna de «Las Mujeres Perfectas». Por aquí se puede acceder desde la ruta 9 al centro de la ciudad. Roldán fue inaugurada en 1866. En un principio fue nombraba Bernstadt, que significa ciudad de Berna, en honor a las primeras familias que se establecieron provenientes de Suiza. Estas tierras pertenecieron a los Jesuitas, quienes fueron expulsados y finalmente fueron adquiridas por un diputado llamado Felipe M. de Roldán. Y ese es el motivo del cambio de nombre que nos simplificó a todos la pronunciación. La cuestión es que esta ciudad, que creció en torno al ferrocarril como muchas otras, no ha sido tocada por la varita de la estética refinada. A excepción de Sargento Cabral, que es una calle ancha, con arboleda frondosa y super añeja. Las casas lucen esos jardincitos delanteros impecables, de cercos bajitos, que te invitan a sentarte a mirar la gente pasar. Siempre perfectos, una alfombra de pasto con sus canteros que no saldrían en ninguna revista Jardín pero que le dan un toque de color y alegría. Si vas a Roldán, entrá por calle Sargento Cabral y camina esas cuadritas, que no son muchas, pero valen la pena.