Guilford

Quien se dedica a la confección de ropa para mujeres en Rosario sabe sí o sí de Guilford. Bueno, en Rosario y en Buenos Aires, porque allá está la matrix. Las telas de Guilford son de alta gama, sobre todo el modal, es una belleza. Tiene un brillo, tiene una caída, que cualquier cosita que uno haga queda espectacular.
Venden, además de modal, lycra y encajes, o sea, todo para hacer ropa interior y trajes de baño. De hecho, creo que estos rubros hacen a sus puntos fuertes de venta. Es que si no hacés una pieza chica, como una bikini o una bombacha, no te dan los números.
Durante mi incursión en el terreno de las telas, las tijeras, los moldes, visité una sucursal de Guilford en Capital, más precisamente en Once. La diferencia con Rosario era que tenías más variedad de colores y estampados, y no recuerdo si también los precios eran un poco más bajos, probablemente.
De todos modos, en Rosario hay colores a patadas. Me acuerdo la indecisión que me agarraba cuando estaba frente a todos esos rollos sedosos de modal «de Guilford». Creo que reconocería su textura con los ojos cerrados. El revés de la trama brilla en Guilford.