Librería artística

Había pasado mil quinientas veces sin enterarme de lo enorme que es por dentro este negocio. Es que el frente es pequeño, y la vidriera exhibe esas cajitas de madera para colorear que mucho no me llaman la atención.
Pero adentro se extiende a lo largo, y tienen de todo, de todo, de todo.
Qué se yo, la vez que fui había cientos de acrílicos, óleos, pinturas para tela, acuarelas, hojas, cartulinas, arcillas, pinceles, espátulas, atriles, etc., etc., etc.
En mi caso, buscaba esténcils porque necesitaba pintar telas. La dueña, encantadora, me sacó un carpetón con muchísimas figuras para elegir. Además había otras opciones para pintar telas, o para pegarles cosas.
Compré algunos esténcils y algunos potecitos de pintura para tela, eligiendo colores y variedades entre los tantos que había para elegir.
Me encantan estas librerías artísticas, dan ganas de ponerse a hacer cosas, de comprar unos óleos y ponerse a ensayar sobre lienzos, o cartones, o maderas.
Desde ya, recomendadísimo lugar para quienes se dedican o están en planes de dedicarse a las bellas artes, a las manualidades, o a pasar buenos ratos pintando, por puro gusto nomás.