MEENCANTÓ! Lo conocí de casualidad, si querés algo artesanal y sabor originales. Este es tu lugar! Es cremoso y muy rico. La verdad es q me fui fascinada, tanto que volví A pedirme un cuarto A la noche. Mis favoritos son: kinder y chocolate con almendras. Me encantaron. Además. .es bastabte barato. 2 bochas a 25 pesos! Menos mal que no soy de rosario si no, estaría sentada ahí todo el dia. Hacen delivery pero también hay mesitas. Me han dicho que los sundaes son lo más! Será mi prox A rosario!
Brenda M.
Rating des Ortes: 4 Rosario, Argentina
Ésta es la sucursal que más me gusta de Monks, especialmente porque es como cuatro veces más grande que la otra que encontramos por calle mitre al 400. Es una heladería que no tiene tantos años de antigüedad como otras conocidas en la ciudad como es Bajo Cero. Pero aún así le gana en calidad a varias que le ganan en años. Hay una gran variedad de gustos para elegir, desde el especial de la casa que es el famoso Dulce de Leche Monks, hasta el clásico chocolate. Y todas estas cremas son artesanales, lo que les da ese sabor tan intenso y la textura única. Una de las veces que vine quise probar algo nuevo y en lugar de pedir el helado de forma tradicional(en vaso, cucurucho, etcétera) pedí una especie de Milshake o licuado como quieran llamarlo, de crema oreo. ¡Estaba exquisito! Sé que hay otros sabores y otros«platos» ya armados, pero por el momento sólo he probado ese y se los recomiendo.
María Belén N.
Rating des Ortes: 4 Rosario, Argentina
Monks es una heladería que hace un par de años ya está en Rosario, pero ahora abrió un nuevo local en calle Moreno, esquina Tucumán y digamos que repuntó. Sus helados siempre fueron bien artesanales y ricos, pero el local anterior(que sigue abierto) era muy pequeño y lo único que convenía hacer era pedir el helado a domicilio, ya que uno no podía sentarse a disfrutarlo ahí. Ahora todo esto cambió, la nueva sucursal es grande y está muy linda decorada por lo que uno puede ir a tomar un café u obviamente un helado y quedarse un buen rato charlando. Los gustos son bien cremosos y artesanales, tienen los más clásicos y algunos medio extravagantes que definitivamente recomiendo que prueben. El dulce de leche Vaquita y el gusto de huevo Kinder, van a enloquecerlos. La atención es normal, el delivery medio lento, así que si se acuerdan antes, pueden hacer el pedido mientras cenan y así ahorrarse tanta espera. Los precios son normales, no tienen diferencia casi con las otras heladerías de Rosario. Si lo hace la cafetería, que produce buenos frappés a la mitad de precio que en Starbucks. Es una opción más para tener en cuenta a la hora de hacer la degustación de las distintas heladerías que la ciudad del helado artesanal, tiene para ofrecer.
Joaquín G.
Rating des Ortes: 5 Rosario, Argentina
Hay dos de estas heladerías en la ciudad, pero la otra es medio metro cuadrado, por lo que si querés sentarte ahí a tomarlo, acá tenés que ir. Este helado es de lo más rico que hay, recomiendo fuerte el Dulce de Leche Vauquita y Mousse de Maracuyá, aunque todos son riquísimos, y no son más caros que cualquier otra heladería artesanal local. También venden ese mambo en vaso, tipo milkshake con café y espuma arriba, que nunca probé pero algún día quizás, siempre prefiero el helado, éste producto es ampliamente más barato que la multinacional que eligen los que les gusta mostrar lo que comen en Facebook. La atención siempre es muy buena, siempre que me recomendaron gustos sabían de lo que estaban hablando, el de Kinder es muy bueno también. En fin, si querés probar una heladería buena y que no sea la de siempre, Monk’s juega.
Eric M.
Rating des Ortes: 5 Rosario, Argentina
Ya les hablé en otra reseña sobre Monks y me referí a él como una especie de Starbucks del sub-desarrollo o si se prefiere(y suena mejor) un Starbucks de la Patria Grande. Sin embargo, cuando lo hice me basé en el local que está en Tucumán y Mitre. En aquel local, varios fuimos los que nos quejamos del escaso espacio que se ofrece, y lo incómodo que puede resultar a veces intentar tomar tu café tranquilo en la vereda porque la gente pasa y mueve la mesa. Acá, en Tucumán y Moreno, el local es muy pero muy amplio y por lo tanto la experiencia resulta mucho mejor que en la sucursal que queda algunas cuadras más adelante. Además, las mesas son espectáculares, mucho más cómodas y bonitas las del otro local. Recomendadísimo. Cremas heladas riquísimas, un café de ensueño y precios que le pasan el trapo a Starbucks.