el hotel es chico pero no deja de ser cómodo. está ubicado frente a una plaza y a una cuadra de la terminal, y tienen cocheras propias. cada piso tiene una organización diferente, como si agregaran uno nuevo de vez en cuando sin preocuparse porque coincida con los anteriores. uno puede optar por hospedarse en suites o en departamentos equipados con cocina. los departamentos son amplios y cuentan con todas las comodidades, como microondas, pava eléctrica, vajilla, secador de pelo, televisión por cable y conexión a internet. baños impecables y buena presión de agua en la ducha: fundamental. muy buena la atención del personal, que contestan todas las preguntas de turista bobo con muchísima paciencia.