El lugar es muy lindo y está bien ambientado, además de que está en plena costanera. Está muy bueno para picar algo a la tardecita, cenar o tomar algo al aire libre en verano. La comida no es gran cosa, pero hay bastante variedad para ser más un bar que un restó y es rica. Pasan buena música y la carta de tragos está buena y es variada. La atención en general suele ser rápida, aunque en alguna que otra oportunidad tuve que esperar mucho, así que sugiero preguntar qué demora tienen en esa oportunidad particular. Recomiendo reservar mesa porque suele estar lleno. En verano es ideal para sentarse en las mesas que ponen afuera; sugiero hacerlo sobre avenida Dante Alighieri, porque hay más espacio, pasa menos gente caminando entre las mesas y corre más aire. Lo más: la ubicación, las pizzas y los tragos. Lo menos: no siempre tienen suficientemente frías las bebidas.