Fundación Las Rosas

En mis años universitarios se me ocurrió realizar fotografías de ancianos, qué mejor lugar que ir a este lugar.
Fui con una compañera de estudios, la idea era una exposición fotográfica del lugar. Pedimos permiso y aceptaron felices.
Cuando llegamos al lugar presentí que en realidad no sería nada fácil realizar la temática. Los tatitas se alegran mucho de ver cualquier rostro nuevo. El ambiente es sobrecogedor, «si eres sensible no sirves para esta pega», me dijeron alguna vez… y es muy cierto, me puse a sacar fotos y de pronto no encontraba a mi compañera, me puse a buscarla. La encontré llorando a moco tendido en un patio interior. Mal, muy mal, no puedo sacar fotos me dijo. Le sugerí que hiciera fotos de los patios y las flores y así fue.
En fin, la reflexión es que todos vamos para allá, sí o sí, de manera natural… si es que no te mueres antes en algún accidente o por enfermedad. Admiro a la gente que es capaz de entregar su vida en voluntariados. Si quieres puedes ser parte de esto, no es necesario ser parte de algún voluntariado, puedes darte una vuelta y entregar cariño en algún hospital. O bien a tus propios seres queridos. Disfruta la vida mientras dura.

De esta fundación tengo recuerdos muy lindos de la época en la que estaba en el colegio, porque hacíamos visitas periódicas a estos hogares.
Pero recientemente me enteré por una amiga que está pasando por un período crítico y que ha cerrado ya varios hogares. Además, tienen problemas para poder alimentar a todos los adultos mayores que tienen a su cuidado.
Aún así hacen todo lo posible porque sus hogares sean el mejor lugar posible para todos. Cuando uno va se nota en cosas tan simples como lo bien mantenidas de las casas (que muchas veces son muy antiguas) y los jardines.
Una forma que están implementando ahora para hacerse socio es a través de captadoras que pueden ir a tu oficina, casa o al lugar donde tu estés. Así que ya no hay escusa si es que quieren aportar.

Esta vez haré una reseña que no tiene nada que ver con comprar, lugares chorifla para comer o locales para ir a bailar, Me encantan, pero creo que también dentro de Unilocal es importante dar a conocer obras sociales que de alguna u otra forma, compartas la visión religiosa o no, prestan un servicio híper importante para toda la comunidad.
La población Chile cada día envejece más, hace poco salió en un estudio que más de la mitad de nuestros adultos mayores no cuenta siquiera con agua caliente en sus casas, para que decir de las bajas pensiones y las condiciones precarias tanto en salud como alimentación y abandono no sólo de cosas materiales, también de tiempo y cariño. Nuestros abuelos tienen mucho para entregarnos desde la sabiduría de los años y es por eso que no los podemos dejar a la deriva.
En pleno centro de Santiago, barrio Toesca, existe este hogar de ancianos de fundación Las Rosas, quienes se encargan de acoger y cuidar a aproximadamente 50 abuelitas que integran este hogar, entregándoles cariño, tiempo y dedicación.
Hay muchas y variadas formas de cooperar con esta fundación y tantas otras que se están haciendo cargo de adultos mayores en situación vulnerable.
Puedes ser voluntario, participar en talleres, entregar tus habilidades profesionales en beneficio de los tatas, cooperar en dinero, entregando utiles de aseo en el hogar de referencia. (colonia, shampoo, pañales desechables, sabanillas, elementos de primeros auxilios, máquinas de afeitar, cremas), participar en las colectas, ser amigo de la fundación. Cualquiera sea la forma que elijas, lo importante es ser constante y consciente (si vas a donar especies, que sean en buen estado y calidad, que la caridad no se convierta en indignidad) todo suma y ayuda para la buena salud de nuestros adultos mayores.
En el caso del hogar de Toesca, si quieres conocer la realidad particular del hogar y saber en que puedes ayudar, puedes escribir a:
Directora: Sra. María Marcela Delgado
Ubicación: Toesca 1964, Santiago.
Teléfono: (02) 23 292 008
E.mail: