Tavelli

No sabía que había un Tavelli en Camino del Alba hasta que me lo topé de vuelta de la universidad, un día que pasé al banco en ese espacio con muchos locales. Hice un break en mi vida y pasé a tomarme uno de sus clásicos cafés helados. Me encantó.
Sigue con el mismo concepto, estética, precios y productos que su hermano mayor. Lo que ahora se suma es que está en una muy buena ubicación, muy tranquila cómoda y con buena vista. Todo lo necesario para hacer la experiencia del tomar café, una experiencia perfecta.
Los productos, ya los conocemos. Té, café, café helado, deliciosa repostería y cosas dulces, sándwiches y hasta ensaladas. Todo con la tradición, el cariño y el sabor que Tavelli sabe ponerle a sus cosas

Juntarse a tomar un café con las amigas o ir a almorzar con la familia es un must en este lugar que contempla diversos cafés, tés, sándwiches, helados, pasteles y almuerzos caseros y algunos más gourmet.
Con más de 40 años de existencia, este lugar sin lugar a dudas es un punto de encuentro de familias y amistades, que más que gastar en comida, pretenden disfrutar un momento agradable, junto a un rico café, pastel o helado.
Siempre que tengo alguna reunión de trabajo o quiero juntarme o alguien, acudo al Tavelli, porque me gustan sus productos, el servicio y me siento como en casa.
Recomiendo sus ensaladas, una que me encanta es la de lechuga con salmón ahumada, sencillamente exquisita. Los helados también son deliciosos y todo el año, ya que en épocas frías qué mejor que tomarse un helado más calórico de chocolate o moka.
Y no puedo dejar de mencionar sus tortas, una delicia, no son tan económicas, pero son muy ricas y vale la pena la compra.