Un gran lugar en todos los aspectos. Una gran oferta de mariscos en cuanto a variedad, valor y frescura. Es una maravilla el concepto de mercado. Siempre se agradece la posibilidad de elegir un producto y que se cobre por el peso de la pieza. La decoración sobria pero amable. El servicio amable y eficiente. Los meseros conocen su oferta y dan consejos útiles. Altamente recomendables los ostiones rasurados, el Alaskan King Crab y el pulpo a la parrilla. Los precios se justifican con el valor del producto. Tienen una buena oferta de cocktailería y están muy dispuestos a satisfacer las demandas, incluso sobre lo que no trabajan.