El concepto de este hostal no está nada mal si tienes plan de visitar Amatlán en plan austero y no gastar mucho en hospedaje. Se trata de una casa con varios cuartos con baño privado, una cocina compartida y la terraza en donde cuentan con varias hamacas como zona de relajación. La verdad me gustò mucho la vista y la armonía del hostal, las casas vecinas tienen gallos q cantan a toda hr. A parte de eso, es un lugar muy tranquilo.