Una de las cosas que nos motivó a salirnos de la ciudad, fue que las construcciones son verticales más que horizontales, es muy difícil encontrar jardines en las casas, yo tenía ganas de ver verde. En Puerto todavía hay mucho terreno, no vemos edificios enormes, por lo general las casa tienen jardín, pero si alguien me hubiera platicado el mantenimiento que requiere creo que lo hubiera pensado dos veces… ni por eso lo cambio por edificios jajaja. Lo bueno de todo esto, es que don José y doña Jose siempre salen al rescate. Es un matrimonio súper trabajador que se dedicar a mantener los jardines muy bonitos. Cortan el pasto, lo deshierban, lo riegan, le quitan lo feo a las plantitas, le ponen abono. Son súper dedicados a su trabajo. Nunca sabes donde los vas a encontrar!!! Andan de un lado a otro, de casa en casa haciéndonos la vida más fácil, después de su visita puedes disfrutar el jardín, hasta que vuelva a crecer el pasto.