Básicamente el servicio es muy bueno, las instalaciones son muy cómodas, que en conjunto hace que te puedas pasar un muy buen rato con toda tu familia. Para mi gusto este restaurante familiar lo tiene todo, juegos para los niños, música en vivo, que por ratos es para bailar y otros solo para platicar, servicio de los meseros siempre atentos y la comida, la especialidad: ¡pollos estilo Dalia! Son los mejores que he probado. Son pollos adobados con cebollitas y nopales pero verdaderamente son una delicia, jamás te arrepentirás. Por si fuera poco hacen las tortillas a mano, y todo lo venden en paquete para que elijas la mejor opción :)