Guayaberas Mérida

Me gustan mucho las guayaberas incluso antes de llegar a vivir al Caribe. Creo que es una prenda muy cómoda y creo que te hace ver bien presentado.
En esta tienda hay guayaberas para todos y de todos los estilos y de todos los colores.
En lo particular no soy muy fan de las guayaberas con muchos adornos, soy más de talle sencillo o liso, para mi fortuna aquí hay de todo.
Manejan varias marcas, cada una de ellas tiene versiones diferentes, incluso telas diferentes. De hecho una de las marcas que más me gustaron su tela es de importación, para ser exactos de lino, hermosa, lisa y con cuello semi cerrado.
Para las damas niñas y niños también hay amplio surtido. Por ejemplo hay vestidos para dama de manga larga bordados a mano y hechos completamente de algodón. También hay blusas y vestidos de gala. Sus costos creo que están razonables al tipo de calidad que ofrecen, pero si lo que buscas es ropa económica, éste no es el lugar.
El personal es muy amable te ayuda a encontrar exactamente lo que buscas.
No tiene estacionamiento, hay que buscarle en la calle

Aunque yo no he visto a mucha gente usar guayaberas a diario sin duda es una prenda fresca, cómoda y hasta elegante.
En esta tienda hay de telas como lino y algodón hasta de telas sintéticas, para todos los presupuestos.
También hay guayaberas para mujer y vestidos de fiesta de manta y hay de todas las tallas incluyendo grandes, así que un vestido de aquí puede ser una buena opción para una fiesta de día o un evento no tan formal
También tienen botones, cinturones bordados a mano que son una belleza.
Uno de los artículos más lindos que venden son unas elegantes guayaberitas– pañaleros para bebé, de algodón y lino, para que tu bebé vaya súper elegante y fresco al evento especial.
El servicio es bueno, nosotros aprovechamos para buscar alguna guayabera que le sirviera a mi viejo para usar casi a diario y encontró varios modelos que le gustaron, desafortunadamente no hay de su talla (había tallas muy grandes) y aunque la señorita que nos atendió nos dijo que nos llamaría en cuanto hablara a la matriz en Mérida para avisarnos si tenían tallas más chicas, hasta la fecha no nos ha llamado y pues ya tiene un par de semanas de eso.
Pero que ni crea la señorita que no vamos a regresar, no se librará de nosotros tan fácilmente.