La hija de Cuauhtemoc

Muy buena opción para ir a tomar una y desestresarte saliendo del trabajo o algo así!!! El ambiente agradable puedes platicar trankilamente sin necesidad d estar gritando buen servicio bueno creo q e tenido suerte cada vz q voy nos an atendido bien y rápido y no se m hace un lugar tan caro

Excelente servicio y sus platillos muy sabrosos

Durante ya hace unos meses unos amigos y yo nos hemos dedicado a buscar y deleitar nuestros respectivos paladares con alitas ya que siempre resulta que tenemos antojo de estas.
Nos juntamos una vez por semana y a veces hasta menos y pues eventualmente terminamos probando este lugar ya que un amigo vive cerca. El lugar se veía de buen tamaño ya que ocupaba como dos locales de una plaza pequeña y se ve todavía más grande en la noche por todo el gentío, sin embargo, no es tan grande y esto causo que estuviéramos bastante amontonados lo cual desde un principio no se siente muy bien.
Tras esperar un poco a que nos dieran mesa después tardaron todavía más para atendernos y los meseros no estaban de tan buen humor (aunque lo entiendo, es un ambiente estresante). Pero bueno, finalmente pedimos las alitas.
Honestamente están un poco caras para la cantidad que te dan pero tienen unos sabores interesantes. Yo pedí unas en salsa de mango y tamarindo que estaban muy ricas. La cerveza no estaba muy fría pero afuera de eso todo lo demás estuvo decente.
Aunque si hablamos de ir por las alitas recomendaría aprovechar promociones en otro lado para que te salga más barato.

Tengo un amigo que trabaja en relaciones publicas y siempre anda metido de aquí para allá en bares, restaurantes y antros haciendo promos y dando cortesías a sus conocidos como yo. Un día nos invito a este lugar y pues ya poniéndonos de acuerdo con otros amigos decidimos visitar para ver que tal. Llegamos un martes y nos dimos cuenta que era de ladies night y había mucha gente por lo cual tardaron en atendernos o mejor dicho en darnos una mesa. Estuvimos parados como 15 minutos y ya estábamos como hartos pero nos aguantamos porque no queríamos dejar mal a mi amigo.
En fin que tuvo que meter mano para que nos pusieran una mesa casi casi en un rincón. Tardaron en tomarnos la orden, el mesero como que enojado y estresado y la verdad nos trasmitió esa vibra fea lo cual nos súper sacó de onda. El ambiente estaba agradable, la música buena y las chicas pues estaban guapas. Pero el gusto no nos duró mi 1 hora hora y nos fuimos, ya no pedimos nada más, nuestras alitas frías, cerveza con poco hielo y mal preparadas, bueno pues que más les digo… Es un muy bonito lugar, tienen buen mobiliario, la zona bastante tranquila y fácil de llegar. Pero el servicio, la calidad en bebidas y alimentos no les ayudo, por lo menos con nosotros que nos encanta crear confianza y amistad con la persona que nos atiende. Con una sola vez tuvimos para no regresar. Espero tomen cartas en el asunto y cuiden mucho mas estos detalles ya que tienen un excelente lugar.

La Hija de Cuauhtemoc es una restaurante-​bar bastante popular por la zona. Su principal atractivo en cuanto al menú son sus alitas de pollo, siendo lo primero que te ofrecen muchas veces, así como el principal recurso en muchas de sus publicidades. Cuenta con «ladies night» los martes.
El ambiente dentro de este recinto es bastante ameno, cuenta con música en todo momento así como también karaōke, ideal para ponerte a cantar frente a un gran público. En cuanto a la música, es bastante variada, tanto lo popular como canciones más antiguas, si la música a alto volumen no es lo tuyo deberías pensarlo dos veces antes de venir aquí.
Este es también un lugar de reunión para esos momentos en los que los deportes están en boca de todos, ya que transmiten partidos tanto de soccer como de fútbol americano. Además también puedes celebrar eventos especiales aquí como cumpleaños.

Un bar sobre avenida las torres, atractivo para quienes vivimos de éste lado de la ciudad, pues por éstos lares no hay bares. El bar está en plena avenida esquina con av chac mool.
Cuando hay eventos deportivos, proyectan los eventos, así que nos ahorramos la ida hasta el centro. Entonces esta padre pues se llena y se arma muy buen ambiente, jaja todos apretados, pero nos contagiamos de la buena vibra.
Aquí lo recomendable es simplemente las cervezas, pues su especialidad no son los cócteles, ni tampoco tragos elaborados. (con decir que ni el mojito está bueno)
Mejoras para éste lugar, el servicio son muy lentos, los meseros no son amables (por lo menos no, en las dos ocasiones que he ido) la variedad en su lista de bebidas es limitada y además no está rico.

Un bar súper relajado, donde no importa como vengas vestido. El ambiente todo un popurrí musical hay días que llevan a una banda y no precisamente de rock, banda sinaloense. Los viernes hay karaōke y música en vivo donde escuchas de todo como las baladas poperas, salsa y las famosas cumbias donde algunos sacan sus mejores pasos, aunque no hay una pista de baile puedes hacerlo cerca de tu mesa.
Cuando hay partidos de fútbol o de americano es muy visitado porque hay una pantalla y buen ambiente para disfrutar los partidos.
En el interior hay pocas mesas, la barra y los baños, casi no hay gente todos están afuera en el ambiente. Amenos que este lloviendo o sea temporada de mucho calor.
Los martes son de ladies night, donde las mujeres toman de 8 a 12 martinis mojitos y margaritas gratis.