Una torta de chilaquiles para consentir al Godínez obeso que todos llevamos dentro. Bastante cumplidora, de un tamaño adecuado para dejarte satisfecho pero sin un coma tipo mal del puerco. La ventaja es que entregan a domicilio y que el servicio es muy rápido. También puedes pedir por teléfono o en sus redes sociales y pasar a recoger tus tortas a su local. Como casi cualquier salsa de Cancún, no pica mucho y te dan una salsita roja para acompañar. Hay varias opciones de salsas a elegir y distintas carnes y acompañamientos, como queso derretido, queso fresco, etc. Buena relación precio-calidad, pero eso sí, vean bien mi foto, así es como lucen verdaderamente, para nada como en sus fotos promocionales. El tamaño es de un bolillo normalito, así que si eres de muy buen apetito, quizá necesites dos tortas.