Los Chilakiles son uno de esos pequeños locales que vale la pena descubrir. Lo descubrí por casualidad mientras caminaba rumbo a la Catedral. Es un negocio pequeño, con meses al exterior e interior del local, ambiente agradable y tranquilo. No es muy grande pero esta bien distribuido. Aunque lo principal son los chilaquiles, también sirven otras comidas como milanesa y sopa de fideos entre otros. Yo por mi parte elegí una torta de chilaquiles con costilla de res. Era enorme, muy bien servida y de muy buen sabor. Puedes elegir entre varios ingredientes. Cuantas con servicio de mesero. No te preocupes si no tienes mucho dinero, con menos de $ 50.00 comes bastante bien. Te lo dice alguien que suele llevar solo los cincuenta pesos en el bolsillo. Eso si, no aceptan tarjeta de crédito(tal vez en un futuro) y al ser local nuevo aún no cuentan con teléfono. Por lo demás todo bien