Vamos a hacer la primera reseña de esta comedor de época, que es como ellos se denominan. El concepto es crear un restaurante de comida mexicana contemporánea, que sea de lo más exclusivo de la ciudad. La inauguración sucedió hace una semana, por lo que se imaginarán que la lista de espera ya es importante, sobre todo porque a los poblanos nos gustan los lugares nuevos. El concepto arquitectónico me encantó, porque retomaron la época grandiosa de la ciudad de Puebla a comienzos del siglo pasado, donde las industria textileras hicieron famosa y rica a la ciudad, por lo que verás hilos, máquinas de coser y hasta una maquina de tela. La comida tiene un sabor exquisito, por lo menos así lo comprobé con su sopa de médula, su ensalada y sus tacos de lengua. Además, podrás pedir cortes especiales y hasta un lechón de 5 semanas para el centro de la mesa. Las bebidas me gustaron, porque cuentan con un carrito especial para las cervezas que van desde las comerciales hasta las artesanales. Además, tienen otra barra movió con bebidas especiales de la noche, aunado a su barra principal donde podrás ver su nombre. La terraza será una de las más solicitadas en estas épocas de fiestas decembrinas estoy segura, además de sus espacios privados para hasta 12 personas. El único pero que les pongo fue el tiempo en el servicio, ya que tardaron en llevarnos los alimentos y no pudieron hacerlos al mismo tiempo para toda la mesa, que aunque era grande, debería ser algo a lo que deben empezar a acostumbrarse. En fin, la comida estuvo rica y el lugar hermoso, que regresaré aunque para una ocasión especial, porque los precios no son nada baratos.