The Mayan Spa

El llegar a este lugar fue como si el destino me quisiera premiar con un apapacho de dioses. Es todo lo que nunca había experimentado en otros masajes. Inés, Miguel y Ángela, harán que te desprendas de ti y disfrutes todos y cada uno de los rituales que hacen. Empezando por el ritual del copal.
Llevaba toda la semana trabajando full, de arriba para abajo, mucho estrés y en el mismo instante que empezó la ceremonia del copal, mi cabeza llena de pendientes, se empezó a despejar. Después vino el masaje, Inés con sus manos, hace maravillas en tu cuerpo. Cabe mencionar que la decoración es hermosa, te hace entrar en relajación desde el olor a aceites, después con el copal e Inés en sí, transmite una notable paz interior que me hizo sentir súper cómoda. Antes de empezar el masaje, te pone un aceitito de eucalipto y te pide que inhales y exhales lo más que puedas tres veces, lo cual hace que sigas relajándote cada vez más y más. La primera parte del masaje, la da con unos guajes, un fruto muy exótico y duro, típico de Yucatán, tiene la forma de una pera y es como de una especie de madera y es maravilloso. Después, ya masajea con sus manos, qué habilidad, sus manos son mágicas.
Cuando acaba el masaje, te sigue chiqueando poniéndote una mascarilla que hace que te quede la piel de porcelana y cierra con broche de oro, un tecito para terminar con el ciclo completo. Todos los sentidos cubiertos por apapachos: la vista con tan hermoso lugar, el olfato con el copal, el tacto con el masaje, el oído con la música elegida cuidadosamente para sintonizarte y alinearte hacia la más completa relajación y termina con el gusto, un tecito orgánico delicioso. Un cariñito global que no te puedes perder, así como la medicina maya, que no sólo cura al cuerpo, sino al alma, este masaje te relaja a través de todos tus sentidos. Altamente recomendado.

Me tocó desgraciadamente ir a trabajar a Isla Mujeres para una grabación (qué difícil es mi trabajo). He ido dos veces y la primera, con suerte conocí el terminal del ferri. Esta vez después de trabajar, me quedé la tarde para poder conocer algo de este pequeño paraíso isleño. Fui caminado por lo que sería algo como la quinta avenida de Playa del Carmen, me detuve en The Mayan Spa, a preguntar cuánto costaba un masaje. Tienen uno de treinta minutos a $ 360MXP, mientras me hablaba Inés de los precios, me ofreció una muestra de ello y obvio que accedí. Me dio el masaje llamado Maya Therapy, este masaje es distintos a todos los masajes que has conocido. Se realiza con guajes, un fruto de la zona de Yucatán. El lugar con una hermosa iluminación, te lleva a entrar en sintonía. Antes de comenzar, hacen una limpieza con copal, para conectarte con tu cuerpo y sentir la calma. Los aromas de los aceites y el gran talento de Inés con los guajes, te saca hasta la última tensión de tu cuerpo, toda una gran experiencia. Al terminar el masaje, comienza el maravilloso tratamiento facial, que a partir del tipo de piel que tengas, usan yogurt natural, miel o aguacate. Tras todos estos cariñitos deliciosos, te dan un té preparado por ellos con diversas hierbas servidas en una taza de guaje. Yo no quería que se terminará jamás de los jamases el masaje, así que cuando vaya de nuevo a la Isla, será nuevamente mi primera parada.