Bar La Reata

De esos lugares que los hace el nombre. jajajaja le atinaron poniéndole un nombre gracioso y lo mejor es que llegas y no te decepcionas.
Este bar tiene la mitad de bar y la mitad de cantina. Lo de cantina es por la entrada y por el tipo de botana. En un bar la botana es palomitas y frituras. En una cantina es comida.
Se me olvidaba, estábamos en el centro. Queríamos echar unas cervezas pero ya habíamos pasado todo el día ahí y queríamos cambiar de aires. Un cuate de mi primo, ya ni quiero decirle adoptivo porque me cayó super bien, hasta lo quiero; dijo que conocía un lugar que a nosotros como chilangos nos gustaría, el bar la reata.
Ahí comenzaron las risas y no pararon hasta que cada quien llegó a su cama porque el lugar está muy alegre. Esa noche estaban festejando el cumpleaños de un tipo. Había como quince personas con el y todas cantando y haciendo bromas. Terminamos uniéndonos al festejo porque era imposible no hacerlo. El lugar es medio pequeño pero eso no importa cuando estás pasándola bien.

Entrar a este bar es como viajar en el tiempo, como llegar al viejo oeste, o eso me imagino yo.
El mobiliario es antiguo y las puertas de la entrada son tipo vaivén, es decir, cantineras.
Es el único lugar en el que he comido chamorro como botana incluida con las bebidas, que por cierto, estaba delicioso. Otro de los platillos que distinguen a este lugar es la sopa de almejas.
Es un lugar agradable para ir por unas cervezas y unas buenas botanas. Está privado, no se aprecia el interior desde afuera, así que no hay ajetreo de la calle.
Algo que no me gustó del lugar es que luego entra la música en vivo, con los famosos «palitos» o «troqueros», porque eso no me dejó platicar a gusto.

Este bar tiene un nombre muy peculiar, tanto, que los que no lo conocen, cuando lo escuchan por primera vez creen que los estás albureando o que te estás burlando de ellos. Así es que cuidado cuando lo recomienden.
La verdad es que no soy muy fan de este lugar, hoy es la tercera vez que vengo y, aunque no me desagrada, creo que es muy equis. La pasas bien, a gusto, la música es más como de rock, reguee y de ese tipo. Te atienden muy bien y además te dan botana cuando llegas, como frituras, cacahuates y esa botana barata que nunca falta en los bares, pero lo mejor son las jícamas con chilito, que creo fue lo que más me gustó de este lugar. Las veces que he ido casi no hay gente pero en fin de semana paso por aquí y siempre veo lleno, además ponen un grupo en vivo. Los precios accesibles y adecuados para el lugar. No me quejo.

Íjole, este lugar lo he visitado un par de ocasiones, pero siempre que lo propongo para alguna reunión mis amigos se me quedan viendo con ojos como si yo fuera perversa.
Es picarón el nombre, así que tengan cuidado cuando lo sugieran, seguro les sacarán unas carcajadas a sus amigos. La verdad, lo recomiendo mucho, es un lugar pequeño y tranquilo, la atención es muy buena y es bastante accesible en cuanto a precios.
Las ocasiones que hemos ido solemos pedir las bebidas y enseguida traen la botana para acompañar, la cual está rica y muy variada, así que bien vale la pena ir un rato y pasarla tranquilo y a gusto con sus amigos.

A veces tenemos ganas de ir a algún bar para pasarla bien, con los amigos, y botanear un rato, prácticamente unos drinks súper tranqui, por eso quiero recomendarte un lugar donde la botana esta súper rica.
Se llama bar La Reata, y se encuentra ubicado en el Blvd. Mariano Escobedo, frente al centro comercial Soriana Malecón.
Yo fui en una ocasión con mis amigos, ya que era un viernes y todos teníamos ganas de hacer algo, así que un amigo nos puso esta opción, y fuimos. El bar está súper agusto, es un poco pequeño, pero esta agradable, relajado, y puedes pasar un rato muy agradable con tus amigos o con cualquier compañía que vayas. De igual manera, a mí me gusto mucho la botana, ya que tienen una variedad muy amplia y cocinan súper rico, yo no sabía que existía este lugar ya que esta medio escondido, pero ya lleva varios años en ese establecimiento.