Frontera Restaurant

Cuando uno viene de compras a León por muy rápido que uno cree que vaya a ser la visita siempre se extiende, y es que hay tantas tiendas, modelos, plazas (sólo en esta zona de la ciudad) que mínimo se te van unas cuatro horas, y eso si vienes solo o sola, pero si vienes con la familia obvio es más tiempo.
El hambre ataca en las compras, siempre. Aunque en Hilario Medina hay varias opciones para comer rico y barato, creo que una de las mejores opciones es Restaurante Frontera, que está justo frente a la terminal de camiones. El restaurante es grande, así que aunque se vea mucha gente es buena idea venir a ver si hay lugar (seguro lo habrá).
Venden todo tipo de comida: tacos, quesadillas, sopes, tortas, guisados, comida típica del estado, pescado, mariscos, postres, agua de sabores, refrescos, cervezas… Los precios son bastante accesibles, el gasto dependen de lo que pidas, pero es barato.
Te atienden bien, si hay mucha gente tardan un poco, pero en general la atención es buena. Este lugar es ideal para desayunar, comer o cenar.

Llegamos a (La) Frontera como toda la demás gente (?): hambrientos, cansados y hartos de ver toneladas de zapatos. Este no tan pequeño restaurante frente a la central de autobuses no te invita a pasar: en la entrada tienen las planchas, tipo taquería, y las mesas están al fondo, demasiado juntas para mi gusto. Mi papá siempre escoge este tipo de lugares, porque hay mucha gente (lo que quiere decir que está bueno y/​o está barato). Si entraste por alguna de las dos opciones, acertaste, pues pagarás entre 50 a 100 pesos por un platillo decentemente cocinado. Hay de todo, desde caldos hasta pescado, y la sección de tacos se destaca por las quesadillas muy bien servidas. Aquí conocí la sopa de médula y déjame decir que no la comería en otro lugar. No veo este restaurante teniendo éxito en otro lado: su aire de mercado es perfecto para quienes buscamos ahorrar y comer bien mientras buscamos zapatos, y más cuando vas con familia grande.