Lavandería Planchaduría

Es un hecho: cada vez más familias dejan de lavar en casa. En mi hogar debido a las labores de cada uno y nuestra falta de tiempo, y por supuesto una mayor participación de mi mamá en la vida laboral, han hecho que se generen montañas de ropa sucia.
Optamos por pagarle a una señora para que nos lavará pero la muy pilla se empezó a robar nuestras prendas interiores así que decidimos llevarlo a Lavandería y Planchaduría, gastamos lo mismo pero ahora nuestras ropa va segura y regresa igual.
Muy buen servicio el que da, el señor a veces es un poco cara larga pero nada fuera de lo normal, pero conocen bien los ciclos de lavado, utilizan según el tipo de fibras y saben el tratamiento para desmanchar las prendas, así como los tiempos y movimientos de su doblado y planchado.