Calesas

Originarias de España, las calesas se han popularizado a lo largo de muchísimo años aquí en la ciudad, y si bien es un gran atractivo turístico, para la gente que vive aquí y tiene que ver el maltrato permanente que le dan a los caballos, pierde todo su atractivo. Además que muchas veces detienen el tráfico de una de las avenidas principales de la ciudad que te lleva de norte a sur.
En cuestión estética y a simple vista, se puede observar muy bonito como las calesas se pasean por el centro histórico, mientras que los cheferes le van explicando al turismo todo lo que se pueden encontrar por esas calles. Sin embargo, estos pobres animales que jalan la estructura de madera, más las 4 o 5 personas que luego se suben, más el chofer, bueno pues en lo personal, no lo tolero, tortura china lo que les hacen.
Sobre todo porque puedes notar el grado de desnutrición en los que se encuentran los caballos y la tortura de pasar horas en junto al tráfico en una calle sumamente transitada, llena de humo y contaminación urbana. Gran atractivo de la ciudad eso de los paseos en las calesas.

Me muero con las calesas. ¿Qué tiempo es este de estar maltratando animales para dar un paseo? Para diversión-​que-​parece-​de-​ficción (de niñus, de mentiritas) está el cine, una feria escenografiada, los cuentos de mi ex, caray. Los caballos ¿qué culpa tienen? No estoy siendo extremista, párense a verlos un día :c A los caballos los tienen ahí a pleno rayo de sol. Por ejemplo, en el spot sobre la calle 61, esquina con 60, ahí están TOOODA la mañana y tarde. No tengo nada contra los dones y chavos que los conducen, pero chale. ¿un lugar bajo la sombrita, no hay (mínimo)? ¿Por qué asumimos que los animales son máquinas de carne y hueso?
Pa’ colmo de males, el olor de los regalos que van dejando los caballos por la ciudad. pff. No pertenecen a este contexto ya.
Me muero de ganas porque llegue ya el día en que esas calesas sean reemplazadas por puras bicicletas. O bueeeno,‘hombre, señor calesero: agarre condición y pedaléele: llévelos de paseo por su propio pié (por su propia pierna). El gobierno tal vez debería de empezar a dar subsidios para iniciar estos negocios c: Mejores salarios y salud para los doncitos y el caballo vivo al campo: pero que no se críen más caballos con el fin de explotarlos.
Como sea, el paseo en calesa no te lleva por ningún lugar nuevo. Realmente el atractivo de subirse a la calesa es el méndigo caballo. Ps por el caballo, mejor agarra una bici :)

Sin duda alguna las calesas generan mucha controversia, habrá gente a favor y otra en contra, sin embargo el pensar que los caballos están más de 12 horas parados, en el sol, con el calor que hace en la ciudad, y además soportando el estrés del ruido y la contaminación del centro de la ciudad, me hace pensar en no querer contratar los servicios de la calesa.
Para empezar los precios son muy caros, pues van alrededor de los $ 350.00 pesos por persona, cabiendo máximo 4 personas, si el jinete se porta buena gente acepta hasta 5, pero imagina al pobre caballo tirando más de 500 kilos, no suena bastante bien. En realidad el recorrido no es la gran cosa, pues solamente te llevan por Paseo de Montejo, lo bonito es que te cuentan la historia de algunos edificios y monumentos histórios, sin embargo, si quieres escuchar la historia te puedes ir en el turibus, el cual cobra menos, ahora si quieres observar los edificios, pues te puedes ir caminando y hasta foto podrás tomar.
Aunque claro, la decisión al final la tendrá cada persona, la cual es libre de decidir si contrata el servicio, o no, algunos jinetes dejan ir a alguna persona a un lado de ellos guiando al caballo, lo cual se ve como una experiencia única.

Desde mi punto de vista muy personal este tipo de entretenimiento sólo funciona para dos cosas: Para que los turistas extranjeros conozcan la ciudad de una manera original y para que las quinceañeras/​novias lleguen en su carruaje soñado a sus respectivas fiestas. Sin embargo, el paseo no es la gran cosa. Dura cuando mucho una hora y yo no podría pasear en paz preguntándome si el pobre caballo que me lleva cargado ha estado todo el día en el sol ardiente sin probar una gota de agua.
En realidad los caballos que utilizan para las calesas no se ven maltratados pero considero que es un acto de crueldad someterlos al ruido y estrés de la ciudad en constante ajetreo, con los coches y las luces a todo lo que dan. El paseo puede parecer muy tentador y es la manera en la que los jinetes se ganan la vida, pero no sabría decirte qué tan bien atendidos están éstos caballos.
Si eres un amante de los animales probablemente este no sea tu tipo de transporte además de que el paseo es bastante caro y si eres de la localidad pues los sitios a los que te llevan probablemente ya los conoces. Pero si vienes de visita y sólo tienes algunos días para conocer toda la magia de Mérida y además quieres pasar una experiencia que sin duda no vas a olvidar, te recomiendo este tipo de paseo. No es mi estilo pero habrá gente a la que le guste la pomposidad.

Me siento mal porque cuando era pequeña y venía de vacaciones a Mérida, me encantaba subirme a las calesas y hacer el recorrido.
Ahora me doy cuenta de que los pobres caballos sufren mucho. Si te fijas bien, se ven muy flacos y descuidados. Entiendo que es la manera se subsistir del señor que los maneja pero pienso que debería buscar otro trabajo donde no dañe a los demás.
Aparte, el tour los dan a medio día donde el sol quema bastante. Pobrecillos.
Mejor les recomiendo que si quieren conocer esa parte de la ciudad, lo hagan caminando o en bici. En Paseo Montejo puedes rentar una y es mil veces mejor experiencia.
Lo único chido que le veo a las calesas son las historias que te cuenta el señor sobre todas las casas de Paseo Montejo y el centro. Pero ya estamos en otros tiempos. Mejor agarra tu cel y búscalo en internet y así todos felices sin maltratar a nadie.

Aunque me parce un recorrido muy bonito y original para conocer la ciudad pienso que en esta sociedad ya no deberíamos de permitir este tipo de actos de maltrato. Yo me considero enemigo de la forma en la que tienen trabajando a los caballos de estos carruajes, todo el día bajo el sol y con el calor que hace en esta ciudad, caminando y arrastrando la carreta durante horas.
Por otro lado como decía, me parece que es una forma original de conocer la ciudad, es una manera de apreciar los edificios y monumentos de la ciudad de otra manera, con la explicación de del señor que guía los caballos y además puedes admirar más tiempo las cosas porque van más lento, el recorrido es prácticamente el mismo que los demás tours guiados de la ciudad; comienza en la calle 60 siguiendo por los parques, iglesias y museos y cruzando Paseo Montejo. La duración del recorrido es de 45 minutos y tiene un costo de $ 300.00.