Más que un bar, a mi su barra y sillas metálicas con mesas naranjas, me recuerdan más a un clásico café gringo, de esos que salen todo el tiempo en las películas. No me gusta la gente que va porque se nota que llevan años frecuentándolo y no son muy sociables. No recomendable para chavos que buscan buen ambiente, ni para parejas de románticos. Chance sólo cuando hay dos por uno en cervezas de barril. Mi recomendación: aprovecha el dos por uno y ya que andes contento ve y busca otro lugar.
Luis Guillermo S.
Rating des Ortes: 3 Mexico City, México
Un bar que es de zona y es un poco más aseñorado en comparación con el Marrakech y La Purísima, por lo mismo más brillante y donde es posible que veas a las personas con que estás consumiendo alcohol. Aquí hasta hay una pista de baile, pero dependiendo de la hora, resulta difícil diferenciar, pues ya después de unas cervezas todos se ponen a bailar gustosos, donde hallen un huequito, aunque resulta algo claustrofóbico y sudoroso intentar compartir una pieza. Si un día no te levantas con las ansias del barrio y algo un poco más limpio, este sitio te gustara. Me resulta curioso como en este tipo de bares también uno como buga tiene la oportunidad de encontrar algo, así que recomendado para todo aquel que guste de echar el baile y el trago coqueto.
Scarlett M.
Rating des Ortes: 4 México, D.F., México
El Viena es uno de esos imperdibles si andas en el Centro y eres de ambiente. Aunque se le ha encasillado como de «dones» no lo es tanto, y menos últimamente. Este está más tranquilo que la Puri o El Marra, puedes mantener una charla a gusto sin tener que gritar. Los precios están accesibles y la música es muy versátil. Si andas en la calle de República de Cuba, pasa a echarte una copita.
Carlos A.
Rating des Ortes: 3 Mexico City, México
Una de esos antros con cara de cantina que desde hace décadas se ha convertido en un símbolo de la comunidad lésbico gay. No tan apretado como el Marrakech ni tan cutre como el 33, el Viena es un lugar para beber y bailar. Con un ambiente que pretende ser trendy y sofisticado, sin perder el sabor arrabalero, aquí suena desde los grandes éxitos pop del momento hasta las rolas más dolidas de la Santanera. Como para empezar una larga noche de fiesta.