Un café no se le niega a nadie y menos a tus amigas. Ir a una tarde de postres y plática es lo más delicioso que puede existir, no te pierdas la oportunidad de ir a esta cafetería y de paso dar una vuelta en la Plaza Cuicuilco, que tiene mucha historia. Los pasteles aquí son deliciosos y si sólo te apetece un panqué con café americano, quedarás igualmente feliz. El ambiente tiene un encanto peculiar, todas las tazas y platos tienen el logotipo y la decoración de cada sucursal más bien te transmite tranquilidad. Esta empresa es 100% mexicana, por lo que el café gourmet que aquí venden viene de nuestra propia tierra. De igual forma puedes probar el chocolate caliente o un capuchino de sabor. El aroma es la clave para que te conquiste el paladar. Me encanta llevar a mis papás, porque se sienten como en casa y pueden probar todas las delicias de la carta, ¡dale una oportunidad!