A mi mamá alguna vez le salieron ESPOLONES, molesto crecimiento del hueso en el talón, su dolor era tal que no podía caminar, era como una gran aguja enterrada. En el IMSS le dijeron: «la única manera de que se le quite es operando y la probabilidad de que le vuelvan a salir es alta o tállelos con masajeadoras de pies(como si los limara)», evidentemente esto tardaría una eternidad en quitárselos. Con la esperanza de encontrar una solución alternativa, le hablaron de las camas CERAGEM. Nosotros vivimos en el Estado, todavía no había tantas sucursales como hoy, encontré una en Tlalpan. Lo maravilloso de este tratamiento es que te curan con camas de luz. Les compras un juego de sábanas y sólo tenías que formarte y esperar tu turno, en aquél entonces no cobraran nada extra que no fueran las sábanas, acá en el Estado sigue ese régimen, honestamente desconozco el del D.F., pero definitivamente en unos 4 meses de curarse a base de luz con los cuidados que tener el cuerpo caliente amerita. A mi mamá le desaparecieron los molestos huesitos en su talón y no le han vuelto a salir. No cabe duda que la energía, el placebo y definitivamente aspectos que podemos desconocer, nos ayudan a sanar. Veo que crecieron los establecimientos de esta marca, espero a muchas personas también les estén dando gran resultado como a mi familia.