Centro de Estudios Superiores de Ortodoncia

Este lugar fue mi salvación para que pudiera tener una sonrisa más o menos decente. Este Centro de Estudios en Ortodoncia otorga la ventaja de que e público en general pueda someterse a tratamientos de ortodoncia a muy bajo costo porque somos «conejillos de indias» de los alumnos que están cursando la maestría en ortodoncia y ortopedia maxilofacial.
Cuando fui a este lugar, por recomendación de mi prima, me hicieron un estudio socioeconómico y unos estudios (radiografías, fotos y tomaron moldes de mis dientes). El doctor José Antonio Rozo fue el encargado de llevar mi caso, mismo que le sirvió para titularse.
Me hicieron una operación para bajarme el colmillo que lo tenía muy arriba, me extrajeron los cuatro premolares y comenzó el tratamiento de ortodoncia con brackets, ligas y todas esas cosas dolorosas, pero que sabes que al final te dejarán una bonita sonrisa.
Mi tratamiento duró cuatro años y en cada uno de ellos el doctor Rozo le dio el seguimiento a mi caso. La atención es bastante buena y eficiente. Eso de «conejillos de indias» no lo digo tan en serio, porque cada decisión o cada cambio en el tratamiento era supervisado por los profesores de los estudiantes, quienes les hacían cuestionamientos y pedían que le explicaran a los pacientes cuál era el procedimiento que iban a realizar.
El costo por todo el tratamiento es mucho más barato que en las clínicas privadas, quizá sea un poco engorroso llegar muy puntual a la cita y tener que esperar porque la demanda es muy alta. El área de consulta es muy amplia pero no es privada, hay como 40 asientos para que los doctores te atiendan así que mientras te aprietan el alambre, puedes ver al paciente de a lado pidiendo ligas de colores o a un profesor regañando al doctor-​alumno. De esta forma ¡todos terminamos aprendiendo algo de ortodoncia!
Recomiendo mucho ir a este centro como paciente y llevar a cabo un buen tratamiento de ortodoncia en manos aprendices, pero expertas a la vez.