Cada vez que alguien dice –Cheex– se me haca agua la boca. Este restauran en el que sirven de todo, comidas corridas, hamburguesas, alambres, sopas, tacos, sandwich, guisados, etc, es uno de mis favoritos para comer y podría hacerlo diario. Este lugar es especial por muchas cosas, sus cómodos gabinetes, su atención, el hecho de puedes poner cuanto queso, catsup o salsa gustes a tus papas o hamburguesa y no te lo están midiendo, su jugo de uva es glorioso: no te raspa la garganta como aquellos que solo usan colorantes y sus postres no aptos para diabeticos son tres de las muchas razones por las que cualquiera debe de comer ahí aunque sea una vez en su vida.