Descubrí este lugar hace unos meses por su deliciosa torta de chilaquiles(con un huevo estrellado encima es increíble). Recién volví para probar su platillo insignia: «Los Enchilados» 3 memelas apiladas con frijoles refritos, queso, y cubiertos con salsa verde y roja. Una delicia! Tienen un rico café de olla, jugo de naranja fresco y un amplio menú. Ahora para las cosas negativas(que son muy pocas): El servicio es un poco lento, creo que los chavos no tienen mucha experiencia en una cocina que debería ser rápida, cosa que con el tiempo, estoy seguro que se resolverá. Para ser un lugar de desayunos, a veces se les acaban los ingredientes muy temprano, creo que aun no calculan bien sus cantidades. Lo que debo reconocer, es que en cuestión de semanas, han mejorado en cuestión a servicio y velocidad. No dudaré en sumar una estrella mas a este review si estos aspectos se perfeccionan pronto. Recomiendo ampliamente este lugar para crudear o simplemente gozar de un abundante y original desayuno.