Una noche trovadora, como las de la prepa, como las de los años 60, como las de los revolucionarios de voz desafinada, a veces se invocan en esta peña al lado del camino. Mis nostalgias del guerrillero enamoradizo que creía que era hace ya algunos años se revive cada vez que vengo aquí con la Moni, porque desde que nos conocimos establecimos como condición nunca dejar de cantar y cantarnos. Aunque el cover de 300 pesos contradice todo viso izquierdoso o de compromiso con la revolución proletaria, de vez en cuando revivir la juventud necia que pisa las calles nuevamente, vale la pena(y la peña).
Kiko M.
Rating des Ortes: 3 México, D.F., México
Este lugar esta atrapado en el tiempo. Con la atmosfera de un mesón en los años 70s, este lugar complace tus arranques de nostalgia y necesidad de Trova. Aunque en lo personal detesto la trova, la música latinoamericana y el Son Cubano son algo que disfrute como loco. Definitivamente recomiendo este lugar a quienes buscan una noche«bohemia» y nostálgica. En la parte negativa tenemos varios detalles: Las mesas y sillas son demasiado pequeñas para el humano promedio. Entiendo que de esta manera más gente cabe en el lugar. Pero contemplando que el espectáculo completo dura alrededor de 4 horas, son increíblemente incomodas. El servicio es pésimo, la atención de los meseros es grosera y no se preocupan por el cliente. Los precios un poco elevados y por último, el vino. Un lugar en el que la variedad de vino son simplemente Tinto y Blanco deja mucho que desear. Y no hablo de que solo tienen vino tinto y vino blanco, me refiero a que solo hay un vino tinto y un vino blanco, y los meseros no saben que marca es ni nada.
Yanin A.
Rating des Ortes: 5 Mexico City, México
Lo primero que tienen que saber es que hay un cover de cien pesos, lo cual hace pensar de entrada que los precios dentro son exorbitantes, pero no es así, la carta tiene números muy accesibles al bolsillo de cualquiera. La variedad del menú incluye bebidas con y sin alcohol, así como botanas distintas desde los clásicos nachos hasta alitas. Este lugar musicalizado al ritmo de trova es perfecto para venir en plan de ligue y disfrutar de la compañía de ese alguien especial a luz tenue y en silencio mientras se escucha al artista en turno. Si toca una cantante sinaloense llamada Lorena seguro te deleitarás con su voz y carisma. Si tu objetivo es echar relajo no es opción definitivamente, pues El Mesón de la Guitarra es un lugar para escuchar música mexicana y de otros países latinoamericanos.
Mónica M.
Rating des Ortes: 5 Mexico City, México
Encontrar un lugar en el que se toqué trova y no te toqué un público que pida intensamente«ojalá» de Silvio, es valiosísimo. Noches en las que pasas de un humor melancólico con canciones de Pablo, Aute, Ismael Serrano, Julieta Parra, a movimientos sensuales al ritmo del tambor con música prehispánica, para aterrizar en el platillo final con tres cómicos(por lo regular) excelentes. Nunca te la vas a pasar mal en El mesón. Yo llevé a mi chico que no soporta la Trova y hasta se le olvidó el mal rato que pasó con las carcajadas que le provocaron los cómicos. Por supuesto yo salí de ahí gritando«Te recuerdo Amanda…»
Emmanuel Alejandro J.
Rating des Ortes: 4 Mexico City, México
Yo considero a este lugar, uno de los mejores lugares en México para escuchar musica latina suele llevar artistas de gran calidad Todos los fines de semana, tienen musica en vivo y es un excelente lugar al que puedes ir a pasarte un buen rato, tomando unas copas mientras escuchas una sesión de jazz impresionante gracias a la excelente acústica que tiene este lugar. Este bar es pequeño y se hace más pequeño y se hace más pequeño al calor de las copas, en el momento del éxtasis cuando el artista que tienes frente a ti, está interpretando su mejor pieza. Es un excelente lugar, para redescubrir tu esencia como mexicano y reafirmarla completamente ya que de aquí han salido una gran cantidad de cantantes y de compositores que llenan nuestros oídos de gloria.
Francisco O.
Rating des Ortes: 3 Mexico City, México
Esta peña tiene el mérito de sobrevivir a las estridencias y gustos de la modernidad para seguir promoviendo la música latinoamericana que formó parte de un movimiento poderoso en los años setentas. Así que mientras otros sitios de este tipo ya son sólo parte de la historia, las nuevas generaciones pueden acercarse de manera viva a estas expresiones artísticas en el mismo escenario en el que estuvo, por ejemplo, Chava Flores. Se trata de un rincón íntimo de la colonia Del Valle que ahora vive un resurgimiento con algunos cambios en su formato original para ajustarse a los nuevos tiempos pero sin perder su esencia: música folclórica, andina, trova, salsa, son y afroantillana conforman parte de su extenso repertorio musical, además de dar un espacio importante a la comedia. Es ideal para compartir sonrisas en pareja. «La gente no viene a beber –decía Chava Flores – , toma un pastelito, agua de jamaica y disfruta de música que estaba esperando y no conocía». El lugar fue trampolín de posteriores estrellas a las que en su momento nadie les daba oportunidad: Eugenia Léon, Guadalupe Pineda, Gabino Palomares, Amparo Ochoa… y comediantes como Miguel Galván y Julio Vega. Tal vez el sitio sólo te garantice una cosa: Vas a salir contento.