3 Bewertungen zu Expendio de pulque La Tlaxcalteca
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Mónica M.
Rating des Ortes: 5 Mexico City, México
No puedo creer que a alguien se le haya ocurrido inventar un curado de fibra ¡¿fibra?! ¿En el pulque? Como sí no fuera ya suficiente laxante por si solo. Yo claro no lo probé, pero a la sonsa de Rox se le ocurrió hacerlo y no les cuento, ni a la mitad iba de su vaso cuando tuvo que salir corriendo al baño. Yo me terminé mi litro y ella no regresaba. Maso como al cuarto mi segundo vaso volví a saber de ella ¡Venía contentísima! «¡Momooo! ¡Ya vi como bajar de peso más rápido! Me echo uno de fibra todas las noches antes de dormir y ¡listo! Yo casi le escupo mi curado de avena en la cara de la risa. Les recomiendo este lugar a los pulqueros porque sé que lugar que pisamos, lugar que necesitamos catar. Pero no es en definitiva de los mejores pulques ni del mundo, ni de Guadalajara.
Adriana E.
Rating des Ortes: 3 Mexico City, México
No es el lugar más elegante del mundo, pero una pulquería jamás lo es. Hace algún tiempo, La Tlaxcalteca aún parecía un hoyo funky; ahora adorna su interior con pisos y paredes de azulejos; una clásica fuente de piedra nace frente a uno de los muros. Cuentan con mesas largas para grupos relativamente grandes y mesas redondas más pequeñas, además de una barra, por si vas solo. Como en casi cualquier pulquería, pagas tus tragos en cuanto te los dan. Entre ellos, se encuentran el pulque de piña, de kiwi, de avena, guayaba, piñón y, el más extraño que he probado: pulque de fibra. Me han dicho que el de fresas con crema es delicioso, aunque no lo he bebido aún. El servicio puede ser bueno o malísimo, dependiendo del mesero que te toque, pero este defecto se compensa con sus buenos precios.
Jonathan S.
Rating des Ortes: 3 Mexico City, México
El edificio es llamativo, con toldos curveados sobre los que cuelga una lona amarilla que recita«expendio de pulque, La Tlaxcalteca». Voltear de reojo se convierte en una invitación a entrar al local, atravesar el pasillo de azulejos, recargarte en la barra, pedir un curado de mamey, depositar una moneda en la rocola, elegir tres canciones y sentarte a disfrutar lo bueno de la vida. El lugar está bastante bien ventilado e iluminado, con abundantes sillas y mesas suficientes. Como en la mayoría de las pulquerías, los sabores varían día a día. El curado de guayaba es excelente y seguro encontrarás un sabor que llame a tus papilas gustativas a la acción. Para ser honesto, los precios no son los mejores, pero sin duda es un lugar agradable para echar el trago, porque mantiene entre sus paredes de claros azulejos, a donde asisten locatarios, jóvenes, viejos, que gustan de la densidad babosa del pulque, acompañado de tortillas con salsas picantes, para evitar la embriaguez.