Helado Obscuro

Amo estos helados y los recomiendo cada que puedo, pero anoche cayeron en el absurdo argumentando que no podía pedir un helado doble con dos sabores distintos… para un aficionado al helado esto es muy absurdo. El chico me dijo que tenía que comprar dos bolas por separado si quería tener distintos sabores. Si es por vender más que calamidad, fue muy decepcionante.

Esta pequeña heladería en la Roma tiene un concepto muy original y no solo porque el 99% de sus sabores tienen alguna bebida alcohólica dentro de sus ingredientes, sino también tienen combinaciones diferentes. Olvídate de pedir uno de vainilla o de Oreo. Aquí los nombre van desde Chewbacca (obvio), Frankestein, Negrito Sandía, Encabronada, etc.
Su menú es MUY amplio, así que te tomará algo de tiempo escoger el ganador, pero vale la pena darle el recorrido porque cada sabor va acompañado de una ilustración genial y divertida.

Esta heladería es una parada principal en la ruta de Tren del Mame. Digna para gente que quiere engullir un helado que sabe a un shot tequila barato y pagar demasiado por él.
La fila es larga para llegar a un mostrador lleno de helados con nombres crípticos; donde es imposible saber de qué es qué.
Los precios son caros para algo que sabe a Tonayán.
Definitivamente, son diferentes. Pero no en el buen sentido sino el sentido en que tu primo Fermín es diferente porque colecciona cabezas de pescado.
Lo que atrae a tanta gente es el que tienen alcohol y son «súper chidos» por eso.

Los helados me parecieron excelentes. Son pegadores, así que no se emocionen; el de «Hombre Lobo» me pareció muy bueno (espresso y Jack Daniel’s). Los que no tienen alcohol no están mal, nada del otro mundo, pero si prefieren mantenerse sobrios les recomiendo el de queso con cajeta. Precios regulares y si hay menú de degustación.

Cuando lo único que se quiere ofrecer es el factor de la novedad, la calidad de los productos puedes fallar y eso es lo que sucede por acá.
La intención es buena, la identidad gráfica del lugar es agradable y la decoración linda aunque cayendo en la tentación del «mira, qué cagaditos somos».
La mayor falla aquí es el sabor, si bien todos vamos por la fama de «los helados con licor» no hay un equilibrio entre los ingredientes, pareciendo como si agarráramos una botella de charanda y se lo echáramos a una nieve Nestle de súper. De hecho, los sabores mejor logrados son aquellos en los que el alcohol está ausente.
Por novedad vale la pena ir, el experimento es interesante, pero si se tiene la intención de comer un buen helado (con o sin licor) hay opciones mucho más interesantes.
Ahora bien, si tu intención es embriagarte con un vasito de nieve de piña, este es el lugar, estás en todo tu derecho, adelante, jovenazo.

Con licores de sabores, sangrita, clamato, boost hipnotice, campari, vodka, whiskey, con midori, Ginebra, mezcal o con tequila (entre otros) aderezados con pimienta, sal rosa del Himalaya, Chile piquin y hasta Sweet Tarts (etc) puedes escoger tu helado o paleta (con base de agua o de leche) con chupe. Son una maravilla.
Los sabores van rotando, no siempre son los mismos. Si traes niños o estas jurado también puedes encontrar algunos sabores sin alcohol.
Los precios varían dependiendo del tamaño:
paleta mini $ 8, paleta grande $ 30, vaso $ 35, vaso doble $ 55, cono $ 40, cono doble $ 65, el medio litro $ 140 y el litro $ 240.
También cuentan con precios de mayoreo y te pueden llevar el servicio a tu evento, pide informes.

Una heladería muy chic y original en la Roma donde puedes hace de comer un helado una buena cita romántica, divertida y diferente. Es una buena opción para aquellos amigos que ya se hartaron del cafecito o el plan de la cantina y la cerveza. Este lugar es para echarse algo leve (cierra a las 10) quizás previo al antro o la fiesta.
La idea es echarse un mezcalito, por ejemplo, pero en forma de helado. Hay sabores basados en tequila, ginebra, vodka, vino, whisky, coñac, ron y algunos licores.
A mí los que más me gustan son los de mezcal porque siento que combina muy bien con las frutas. Mis amigas piden el Blind Melon, que es melón verde, mezcal, limón y midori o el Grito Mudo: anís, frutos secos, ginebra, mezcal y canela.
Si te gusta el vodka, no dejes de probar el Panda Punk, con boost, panditas y vodka.
Para los que no beben, también hay helados normales de chicle o de fresa pero te sugerimos entrarle a algunas de sus promociones, por ejemplo: todos los martes de 4 a 8 helados con caféína al 2×1. También prueba las paletas. Deliciosas.

Cuando estamos en un restaurante y tenemos antojo de algo dulce, a veces el postre puede parecer muy pesado y sólo se nos antoja un digestivo, un cocktail o un helado para calmar nuestro antojo. Pero que pasaría si pudiéramos combinar los tres en un mismo platillo?
Esta premisa fue lo que creó el ahora conocido Helado Obscuro.
El pequeño local ubicado en la colonia Roma nos presenta con un nuevo concepto de helados en el que podemos escoger más de 50 sabores para deleitar nuestro paladar.
Los mejores sabores son sin duda el Dark Vader, de chocolate Belga, almendras, licor de chocolate blanco y vodka y el Unicornio, que está hecho con Hpnotiq y frutos del bosque (mora, frambuesa, zarzamora y fresa).
Si no tomas alcohol, no te preocupes. También existen helados sin «piquete» como el Ositos cariñositos, que contiene boost con panditas o el Chewbaca, el cual es nieve de chicle.
Date la oportunidad de experimentar esta deliciosa opción que recomiendo muchísimo.

Dos de los placeres más grandes de la vida se juntaron en un solo sitio para satisfacer tu paladar: helados con alcohol.
Si te gusta lo saladito recomiendo el «Dulcediablo», con toronja, sangrita y mezcal, o un «Tamachín», que es nieve de tamarindo con chamoy y sal de gusano.
Si lo tuyo son los sabores dulces, pide un «Sangre europea», un helado de vino tinto, arándano y vodka.
Aunque si prefieres lo cremoso, el ideal es el «Alice in Wonderbra»:h elado de vainilla con crema de whisky, praliné de chocolate con avellanas y bourbon.
Los precios andan entre los 30 y los 200 pesos, desde una paleta de clamato a un litro completo para compartir.
No siempre tienen los mismos sabores, pero eso le da un plus para que cada que los visites pruebes uno diferente.
Por cierto, las bebidas que aquí se utilizan no son sólo para darle sabor, cada helado tiene una graduación alcohólica suficiente para considerar darle un giro a tu pre copeo.

Quien dijo que los helados eran para niños evidentemente nunca probó uno en Helado Obscuro, la temática hace una analogía entre el villano de la película la Guerra de las Galaxias y lo malvado de un helado.
Pero, ¿podría ser un helado malo? Tal vez, si le agregas vodka, tequila o cerveza, es lo que hace de estos helados algo espectacular, la combinación de sabores rompe los límites de lo cotidiano agregando finos toques de alcohol para ofrecer un producto completamente original.
El lugar no se presta para que lo consumas allí, sin embargo, cerca hay un parque donde lo puedes degustar con calma, pero con el riego de que te acusen de aliento alcohólico en la vía pública (no es cierto). Los costos oscilan entre $ 50 y $ 80.

Cuando Luke Skywalker rechazó la oferta de su padre para unirse al lado oscuro, no tenía idea de lo que se perdía: deliciosos helados y paletas de hielo con sabores fuera de lo común y un toque de alcohol.
Los sabores que ofrecen son de temporada y los ingredientes que utilizan son tan variados y creativos como el nombre de estos, por ejemplo: Zapo Teporocho, hecho de zapote con tequila negro, o Sangre Europea, de vino tinto, arándano y vodka. Pero sin duda mi favorito es Naranja Mecánica, una mezcla de crema de naranja, ginebra y licor de naranja.
Si estás jurado, puedes encontrar helados que aunque no contienen alcohol, rebosan de creatividad, entre ellos la paleta Alas de Toro, que sabe a Redbull, o el curioso Ositos Cariñositos, que mezcla la energía del Boost con la dulzura de las gomitas Panditas.
A pesar de las pequeñas dimensiones del local, la decoración es vistosa y las mesas colocadas en la calle cumplen una finalidad estratégica: mantenerte bien oxigenado para evitar que se te suba tan rápido. Son seis días de la semana en que puedes saborear la amplitud de sabores de Helado Obscuro, y el domingo te curas la cruda con una picante Clamaleta.

Si alguna vez creíste que el Helado y el alcohol se podían mezclar y todos te tiraban de loco pues encontramos a alguien que pensó igual que tú y lo convirtió realidad.
Helado Obscuro esta heladería ubicada en el centro de la Roma te dará una buena idea para salirte de lo tradicional e irte a pre-​copear a una heladería con tus cuates, hay una variedad de sabores y combinaciones de licores, todos son divertidos y te dejaran un buen sabor de boca, nombres realmente divertidos que harán que tu imaginación se ponga a volar; desde un Pink Pony con vodka, fresas, pimiento rosa y licor de moras hasta un Sangre Europea para dominguear con vino tinto, arándano y vodka. Un sinfín de sabores harán que sorprendas a esa chica en su primer cita o también a tu papá si lo que quieres es que te rente ese nuevo departamento enfrente de la super modelo brasileña que seguro vas a querer hasta traerla.
No olvides preguntar por los litros y medios para llevar, así también en la comodidad de tu sillón ya puedes disfrutar de tu buen Helado Obscuro. ¡Increíble!