La Boheme

Siempre había querido ir a este lugar y me súper encanto, como amante de lo dulce soy fácil de sorprender jaja pero realmente las tartitas y pastelillos tienen un diez en sabor y presentación; sin embargo el que se llevó mi corazón fue el cronut, probé el de dulce de leche y sabía a puro amor jeje. El lugar está dividido para los postres y para la comida, que también tiene buena pinta, el ambiente es muy relajado, sin embargo hay mucha gente porque es vecino de mercado Roma, así que si no te gusta tanto bullicio también puedes pedir para llevar. En general súper volvería a probar todo tipo de deliciosos postres jeje.

Si es caro el sitio. Pero vale la pena si te gusta el pan bien elaborado y buenos ingredientes. La ubicación es muy buena y es un lugar idoneo para sentarte a tomar in té/​café.

Es difícil conseguir para un francés un buen pan y repostería afuera de nuestro país. Es uno de esos lugares que ayuden a conocer mejor el arte francés de la cocina afueras del viejo continente. La baguette tradicional sabe como en Francia, probé unas cositas más (eclairs) y eran correctas y sabrosas. Sencillo pero bien hecho, caro por supuesto para México, pero hacen precios un poco más baratos que en Francia.

La cafetería es una excelente opción para comer rico, sano y con bajos costos.
Es una mezcla entre Francia, Italia y México deliciosa

Voy a ser la excepción a la regla con esta reseña, no sé si es porque ya crearon fama y se echaron a dormir, o porque en materia de pan y café soy extremadamente exigente, pero La Boheme para mi ha sido una constante decepción.
Antes de escribir por aquí le di varias oportunidades, el resultado: pan que estaba reseco, croissants quemados y lo peor de todo un café muy débil.
Entiendo que un mal día lo puede tener cualquiera, pero cuando se vuelven varios el lugar está perdido para mi.

Aunque sus precios suelen ser elevados, la verdad es que es un buen lugar para ir a conocer.
Puedes ver perfecto ver como entran y salen los panes del horno, así que no vayas con mucha hambre porque el olorcito te hará comer sin fin.
Sus postres son deliciosos, en especial el éclair. Cada que viene una festividad como Día de Reyes o Día de Muertos, crean pan tradicional con un twist diferente para que sigas las tradiciones mientras tu paladar experimenta cosas nuevas.
Si bien es una panadería para llevarte el pan a casa, tienen unas pequeñas mesitas para que tomes café o degustes tu pastelito.
Si te llamo la atención, es super fácil ubicarlo: se encuentra a lado de Mercado Roma.

Bien rico. No podía ser de otra manera si venden pura cosa dulce, o con chocolate o panecito. Ok, es carillo medio pretencioson pero es un gusto q si puedes darte vale la pena, si esta rico y bien echesito, desde q ves los postres se te antojan.
Hay UNA mesita-​barra con tal vez 4 banquitos, i tienes suerte y te toca ahí, te puedes pedir un café y disfrutar ver a los hipsters pasar. Casi todo mundo se lo lleva o se lo va comiendo, yo me lo he llevado al «mercado de al lado», como sea lo recomiendo, esta rico.

Últimamente hay una moda de poner panaderias francesas en la ciudad, y la verdad siempre le temo a las modas de este tipo ya que para mi significa que se esta poniendo cualquier cosa.
Que queden tranquilos: La Bohemia (en su traducción al español) tiene una exigencia de calidad muy alta.
Todo esta muy fresco, pueden ver el pan que se esta haciendo al fondo del local, y dale calientito. Probamos le pain au chocolat y el croissant y me dio nostalgia mientras mordía las viennoiseries como se dice allá.
Desafortunadamente, el precio es mas elevado que si fueran a comer una torta de tamal en la calle; pero si, como yo, no les duele invertir en lo bueno, no tendran arrepentimientos.
En conclusión: si estan el mercado roma y quieren probar sabor reales de francia, solo tienen que salir y caminar 10 pasos a su izquierda.

Llevo varios años probando los croissants y chocolatines en muchas de las panaderías de esta ciudad, buscando el que más se acerque al sabor y textura de lo que puedes encontrar en una buena «boulangerie» de París. Pues ya, ¡por fin lo encontré! Esta panadería me transportó a la ciudad luz por unos instantes. El croissant y el pain au chocolat han sido los mejores que he comido en años, punto. Dorado en la capa superior, esa especie de telaraña de pan suave por dentro, con un sabor sutil a mantequilla que queda en el paladar (y chocolate), uuuuf. Como para hacer de cada fin de semana la costumbre de desayunar a la parisina. Una auténtica panadería francesa (creada y atendida por franceses) en la colonia Roma. J’adore!

La Boheme tiene la fachada de típica panadería francesa. Los croissants y el pan au chocolat no puede faltar. Ver todo el pan acomodado me hizo recordar mis desayunos en Paris (pan y café) ofrecen un menú que te incluye una bebida caliente y una pieza de pan por 45 pesos, para que desayunes a la europea.
Los panes no es lo único que puedes encontrar en este lugar, una gran variedad de tartas y pastelillos típicos de Francia también llaman la atención: tartas de higos, limón, frambuesa; mil hojas de frambuesa y de chocolate; l’eclairs de chocolate y moras, entre otras tentaciones (yo soy feliz viendo el aparador).
En mi visita, pedí un ópera (pastelito de chocolate) y una tarta de frambuesas. El sabor era bueno, pero no estoy segura de haber elegido la especialidad, sin duda me daré otra vuelta para darle una oportunidad a los otros postres.