Una pareja, ella actriz y él guitarrista, tienen a su cargo este proyecto y casa cultural en que se llevan a cabo diversas actividades, las cuales en ocasiones no se limitan a horarios establecidos de clase o de la actividad cultural, sino que se extienden a la vida cotidiana tanto de los directores como de los asistentes. En la casa de Julio Cruz y Lisa Carrión, entre otras prácticas, él imparte un taller de son jarocho, y a veces tienen lugar grandes fandangos con un elenco que llega a ser de veinte o treinta jaraneros, y su respectivo baile zapateado; todo lo cual suele derivar en una verdadera fiesta. En otra ocasión asistí a una obra de títeres montada por Lisa, y una posterior cena bohemia. Concurre mucha gente talentosa y amigable a la Kasa de los Makusos, y es muy común encontrarse con muchos niños para arriba y para abajo.