Las más ricas lechugas de la ciudad. Las conozco por que antes las producían muy cerca de mi casa. Era fácil escaparme e ir al invernadero de las lechugas: una galera muy grande llena de camas de agua con los nutrientes y las lechugas creciendo. Uno elegíà la o las lechugas que más le gustaran con la calma del mundo y pagaba una bicoca por estas deliciosas lechugas. Te las venden con todo y raíz, por lo que puedes ponerlas en un vaso o en un florero, incluso, por que hasta son bellas, y duran vivas y con todo su sabor hasta 15 días. Ahora están en San Pedro Martir y la dinámica es la misma. Aquí siembran variedades sangría, francesa, y orejona; también tienen cilantro, cebollín, romero y rabanitos. Lo bueno, para mi, es que Doña Librada sigue vendiendo las lechuga en e tianguis de Santo Tomás Ajusco. Ademas, si llevas varias, siempre te da pilón.